Los profesores pueden aprender quiénes son sus alumnos y planificar lecciones basadas en esas necesidades. Esta planificación es un esfuerzo creativo, por lo que, aunque en última instancia mantiene el capitalismo, muchos docentes obtienen una sensación de satisfacción al utilizar su trabajo para crear. Esto ilustra lo que Karl Marx describió en su libro Manuscritos económicos y filosóficos: que existe una conexión humana entre nuestro trabajo y los productos que creamos. Ahora los profesores nos enfrentamos a la desconexión de los medios de producción, es decir, producir nuestros propios textos, preguntas y lecciones. En lugar de la alegría creativa que surge de conocer y aprender de nuestros estudiantes para crear sus experiencias de aprendizaje, se nos está dando un asiento de primera fila en la alienación con la que se enfrenta la clase trabajadora todos los días. El Departamento de Educación de la Ciudad de Nueva York (DOE) ha presentado un plan para obligar a todos los maestros de la ciudad de Nueva York a utilizar el plan de estudios que el DOE produce directamente, comenzando con matemáticas e inglés.
Enseñar a los estudiantes lealtad a los jefes
Los comunistas saben que el propósito de la educación bajo el capitalismo es preparar a la clase trabajadora para las necesidades de los patrones de la clase dominante. Los patrones necesitan trabajadores dóciles que sean explotados voluntariamente, mientras roban nuestra mano de obra. Entonces, aunque los docentes están siendo retirados del proceso de producción de la enseñanza, serán los estudiantes quienes enfrentarán directamente este ataque de la clase dominante. Tendrán lecciones prefabricadas diseñadas por corporaciones y maestros que obedecen las ideologías racistas y sexistas que los patrones quieren enseñar. Mientras que los maestros comunistas han utilizado las aulas para interrumpir la producción ideológica de los patrones, intercalando ideas comunistas y construyendo el Partido Laboral Progresista que algún día enterrará al capitalismo de una vez por todas.
El PLP se ha centrado en el ejército, el trabajo industrial y las escuelas como nuestro método para construir la revolución comunista que transformará nuestro mundo. Los patrones ven a la clase trabajadora volverse contra el genocidio de Israel en Palestina y nuestra negativa a unirnos a sus fuerzas armadas mientras se avecina la Tercera Guerra Mundial con sus rivales capitalistas. Necesitan formar un ejército mucho mayor que el que tienen. Esto se produce cuando intentan disciplinar a los capitalistas más pequeños representados por los MAGA racistas y sexistas. También necesitan una base industrial para la guerra, para reconstruir una infraestructura defectuosa.
Los docentes deben unirse
En una escuela secundaria de Nueva York, el sindicato United Federation of Teachers (UFT) ha estado diciendo que no existe un mandato curricular mientras la administración ha estado haciendo planes para implementarlo. Siguiendo un patrón de cómo cerrarían escuelas más grandes, querían dar a los profesores del edificio la ilusión de poder elegir, diciéndoles que podían elegir entre un conjunto de proveedores, cada uno con un plan de estudios diferente. Gran parte del plan de estudios exigido por la administración contiene libros que exploran ideas anticomunistas y antiobreras. Un libro que se enseña en muchas escuelas públicas es El hombre invisible de Ralph Ellison, un libro vehementemente anticomunista. De toda la biblioteca de literatura negra, ¿por qué ese libro? Este es un tema de estos planes de estudio; enseñan y controlan la narrativa que los patrones necesitan que los trabajadores crean como realidad.
Siendo los jefes que son, el DOE (Departamento de Educación) informó a los maestros que habían subsidiado solo uno de los planes de estudio, básicamente tomando la decisión por ellos. Los profesores del Departamento de Inglés quieren resistir este ataque existencial a sus carreras. El PLP sigue señalando que este ataque es indicativo de un creciente fascismo a medida que los patrones se mueven directamente para tomar el control de los medios de producción ideológica. Un vídeo adjunto a un correo electrónico enviado a los profesores de inglés por la corporación detrás del plan de estudios elegido promocionaba con entusiasmo que los profesores ya ni siquiera tendrían que calificar, ¡ya que ahora la IA (Inteligencia Artificial) haría la calificación! Qué bueno para los jefes, ya que los estudiantes usarían la IA para responder preguntas generadas por la IA en una hoja de trabajo que la IA finalmente calificaría. ¿Qué papel tendría en este escenario el docente como productor además de ser facilitador de los diseños patronales? Los comunistas saben que la respuesta es que los patrones obtendrán exactamente lo que quieren y que los estudiantes serán los que más sufrirán.
El racismo y el sexismo se intensificarán a medida que los barrios de clase trabajadora más explotados serán los que menos ayuda recibirán porque los profesores que reciban utilizarán materias que no están diseñadas para ellos sino para lo que los patrones necesitan que sean. A medida que los patrones presionan por el aprendizaje en línea para poder meter a 60 o más estudiantes en un salón de clases, los estudiantes negros y latinos sentirán desproporcionadamente la vanguardia del racismo. Como los ataques directos contra ellos fueron frustrados por la lucha masiva de la clase trabajadora que se fusionó en el movimiento Black Lives Matter, los patrones usarán directamente su sistema para mantener la inequidad racista necesaria para maximizar la plusvalía para obtener las ganancias que necesitan para mantener su superioridad sobre sus rivales imperialistas y, eventualmente, financiar sus guerras.
Reforma versus revolución
En este momento, la administración está diciendo que permitirán a los profesores de inglés enseñar lo que quieran durante un único período de calificaciones de seis semanas. Esta migaja de reforma se la quitarán fácilmente a medida que consoliden su plan de estudios. Será sólo cuestión de tiempo antes de que los patrones creen los facilitadores de su ideología que necesitan para que el capitalismo permanezca sin amenazas.
La pequeña conexión humana a través del trabajo que los docentes obtienen y que ahora están perdiendo sería mucho mayor una vez que todos estemos construyendo un mundo comunista. Será cuando los estudiantes sean el centro de la enseñanza porque toda la sociedad los verá como productores y su aprendizaje se utilizará para construir un mundo donde se satisfagan sus necesidades. A pesar de no estar al borde de una revolución comunista, los profesores del edificio quieren contraatacar y están organizando reuniones para discutir cómo hacerlo. El PLP está enfocado en construir estas reuniones, facilitar esta lucha y asegurarse de que no sea fácil para los patrones atacar a la clase trabajadora.
