CHICAGO, IL, 1ero de octubre — La ocupación de la casona de campo de la escuela Whittier va para su tercera semana. Parece que después de una semana de confrontaciones directas con los guardias de seguridad de las Escuelas Públicas de Chicago, la policia municipal, los políticos, la clase dominante y su junta escolar están esperando a ver que pasa (Vea DESAFIO, 910/6.)
El Sistema Escolar, que tenía planificada la demolición del edificio, rechazó las demandas de las madres que exigen una biblioteca y un local para actividades después de clases, así que ahora han comenzado a transformar el lugar en una biblioteca y en el centro comunitario que ellas quieren. El trabajo voluntario de bibliotecarios y las donaciones de cientos de libros han transformado la casona en una biblioteca casi funcional, demostrando que no necesitamos a los políticos ni a los bancos y negocios de quienes son lacayos, para resolver nuestra condición.
El grupo de madres, en su mayoría Latinas, están comenzando a ver esto como algo más que una lucha por una biblioteca escolar, porque ahora saben que es ¡simplemente una de las 160 escuelas en Chicago, mayormente de estudiantes negros y Latinos, que no tienen bibliotecas!
Nosotros estamos mobilizando al partido y a nuestros amigos para defender esta lucha.
• Profesores de la universidad Chicago State han circulado una petición en apoyo a las madres y han llevado estudiantes negros a la casona.
• Una estudiante que en el pasado había hecho comentarios anti-imigrantes en clase cambió cuando fue a expresar su apoyo y se reunió con algunas de las madres.
• Un trabajador del correo presentó el tema de esta lucha en su sindicato, hizo una colecta y organizó una parrillada campestre en la casona.
• Varios camaradas han hecho turnos de guardia de protección por las noches.
• Cuando algunas de las madres empezaron a enfermarse, el comité de trabajadores de hospitales de PLP y amigos ayudaron a organizar una feria de salud para ellas. Mientras que un camarada le tomaba la presión a una de las madres, ella le susurró, “me gusta mucho su períodico. Se lo he mostrado a algunos de mis compañeras de trabajo”. Ella y otras más se han reunido para discutir y escribir este artículo para DESAFIO.
Ella entonces describió los 7 años de lucha por esta biblioteca, explicando que su participación al principio fue mínima debido a los muchos problemas en su vida que la apartaban de la lucha, “a veces iba a las reuniones del consejo escolar local, pero por lo general me informaba de otra madre que participaba”.
A veces estoíca y otras veces muy emocionada y al borde de las lágrimas, ella describió los problemas de ser una madre sola criando tres hijos y su historia de maltrato con su ex-esposo. Dijo que su nuevo compañero, que es negro, la trata mucho mejor pero la relacion ha agravado diferencias con su familia debido al racismo.
Ella detalló la presión en su trabajo y la falta de respeto de su patrón que siempre trata de menospreciarla. Pero sonrie cuando habla de sus conversaciones con sus compañeras de trabajo sobre la lucha por la biblioteca escolar.
Las madres ahora ven el panorama total, cómo esta posible demolición es parte de un largo proceso de privatización de la propiedad “pública”, conectada con la construcción de viviendas caras y la destrucción de la vivienda pública de diez años atrás, y la reduccion de los servicios del cuidado de la salud pública.
Por otro lado, esta lucha resalta el valor de los trabajadores que luchan y el potencial que existe para expandir la lucha de clases. También resalta lo necesario del rol del PLP en la lucha para desarrollar las conexiones personales a largo plazo y agudizar el entendimiento ideológico de cómo las re-urbanizaciones racistas y las privatizaciones no son simplemente “malas decisiones”, sino más bien necesarias para el capitalismo.
Durante las crisis económicas y las guerras imperialistas, los patrones les quitan aun más fondos a los servicios públicos, a las escuelas públicas, y a las viviendas, así como tratan de lucrarse aun más del salario de los trabajadores, de las pensiones y de los seguros de salud.
Al margen del resultado de esta lucha, el poder del estado todavía esta en manos de los patrones. Su plan ahora parece ser esperar a ver que pasa en la comunidad, pero eso también podría cambiar. Una cosa es segura: esta lucha va a transformar a los padres y a la comunidad también.
Nuestro partido debe redoblar esfuerzos en nuestras organizaciones de masas para apoyar a los rebeldes de la Whittier. Esto es especialmente importante porque dentro de la lucha contra estos ataques luchamos contra las cancerosas ideas del racismo, la propiedad privada y el lucro, y el divisivo nacionalismo que no permite que nuestra clase este unida para luchar por una sociedad que destruya estos males – el comunismo.