Mientras la rivalidad entre EEUU y Rusia se acerca a un conflicto abierto, la importancia estratégica de Ucrania está resurgiendo.  A mediados de diciembre, el presidente ruso Vladimir Putin exitosamente presiono a la empobrecida Ucrania a permanecer en la órbita rusa y cancelar su planeada alianza con la Unión Europea (UE), inclinada hacia EEUU y el Fondo Monetario Internacional (IMF), manejado por EEUU.  Putin compro a Ucrania ofreciendo un préstamo de $15 mil millones y un 33% de reducción en los precios del gas.  En agradecimiento, Moscú recibe el control de la red de ductos de energía de Ucrania.  Pero los intereses aquí van más allá de lo económico.  Tienen todo que ver con las preparaciones militares para futuras guerras.  
El 17 de diciembre, Stratfor, analista de inteligencia que asesora a Exxon y otras grandes corporaciones, advirtió a sus lectores capitalistas:
Ucrania es tan importante para la seguridad nacional rusa como Escocia es para Inglaterra o Texas es para Estados Unidos.  En las manos de un enemigo, estos lugares podría ser una amenaza existencial para los tres países…Ni Escocia ni Texas van a ningún lado.  Tampoco Ucrania, si Rusia lo decide…Ucrania es el punto débil de Rusia…Bajo la influencia o el control de un poder occidental, el costado sureño de Rusia (y Bielorrusia) está completamente abierto…abarca desde la frontera este polaca hasta casi Volgogrado [originalmente Stalingrado] y después al sur del Mar de Azov…[más de]1,000 millas, más de 700 de las cuales están al lado de Rusia….Para Rusia, Ucrania es una cuestión de seguridad nacional fundamental.  Para un poder occidental, Ucrania tiene valor solo si ese poder está planeando enfrentarse y derrotar a Rusia, como trataron de hacer los alemanes en la Segunda Guerra Mundial.  
Putin Frena de Golpe Expansión de La OTAN
 Putin no solo frustro a la UE y el FMI; freno de golpe la expansión de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) dirigida por el Pentágono.  Fundada en 1949, cuatro años después de finalizar la Segunda Guerra Mundial, la misión principal de la OTAN era prepararse para una guerra europea contra la URSS (Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas).  Después que colapsara la Unión Soviética, la OTAN se extendió en una operación militar mundial a través de tres continentes.  Su presencia se sintió en Europa, África del Norte, Irak, y Afganistán.  
En la década de 1990, con el imperio Soviético hizo el comunismo como algo del pasado, los oportunistas gobernantes de EEUU exitosamente enlistaron 12 de los ex satélites de Moscú a la OTAN.  Pero Ucrania es un caso especial porque comanda los puertos navales del Mar Negro de Rusia.  Estos lugares no se congelan en el invierno, una ventaja crucial en tiempos de guerra.  Putin y los capitalistas rusos a quienes representa no pueden permitir que Ucrania se una a la alianza militar dirigida por EEUU, su amargo rival imperialista.  
El freno a Ucrania de Putin señala un endurecimiento en la posición de Rusia que fue anticipada por los más visionarios planeadores estadounidenses.  A finales de los 1940, el diplomático George Kennan formulo la política estadounidense de “contención” de la URSS, estrategia central de la Guerra Fría seguida por los presidentes de EEUU, desde Harry Truman hasta Ronald Reagan.  Contención era la base ideológica de las atrocidades de EEUU en Corea, Vietnam, Nicaragua y Afganistán.  Al mismo tiempo, permitió que los patrones estadounidenses evitaran una confrontación directa con las poderosas fuerzas soviéticas que aplastaron a los Nazis en la Segunda Guerra Mundial.  Kennan advirtió que moverse más allá de la contención y OTANizar el viejo bloque soviético era un “trágico error…los rusos gradualmente reaccionaran desfavorablemente” (New York Times, 2/5/98).  También detallo el crítico fracaso de los capitalistas de EEUU.  Mientras confiaban más y más en acciones militares regionales, ellos aún no movilizaban la nación para una guerra global.  “Nosotros nos apunamos para proteger una serie de países,” escribió Kennan, “aunque no tenemos ni los recursos ni las intenciones de hacerlo de una manera seria.”
Los patrones de EEUU en general, ignoraron a Kennan.  Creían que tenían a Ucrania en sus manos después de la Revolución Naranja del 2004, una de las presuntas “revoluciones de color” en las antes republicas dentro de la vieja URSS.  Financiada en gran parte por varias fundaciones controladas por George Soros, multimillonario liberal, la Revolución Naranja puso a la pro-OTAN Yulia Tymoshenko en el poder en una disputada elección.  
Revolución = Toma del Poder por la Clase Trabajadora
En realidad, estas “revoluciones” no tenían nada de revolucionarias.  La revolución ocurre solo cuando la clase trabajadora violentamente derroca a la clase dominante, aplasta el poder estatal de los gobernantes y establece un nuevo gobierno de clase y su propio poder estatal.  Ni las elecciones capitalistas ni una “Primavera Árabe” pueden hacer una revolución.  Solo trabajadores, dirigidos por un masivo partido comunista, puede lograrlo.  
En el 2008, los gobernantes rusos se encargaron de la “Revolución Rosa” en Georgia invadiendo su vecino del Mar Negro.  Pero el verdadero blanco de Putin era Ucrania.  El 28 de agosto de 2008, Agence France Press cito a F. Stephen Larrabee de la corporación RAND:
Georgia es una distracción.  Lo que en verdad le preocupa a los rusos es Ucrania.  La entrada de Georgia a la OTAN no tiene grandes consecuencias estratégicas para Rusia.  Ucrania, por otro lado, es otra cosa.  Si Ucrania se une a la OTAN, Rusia no solo se verá forzado a mover sus barcos con base en Crimea; sino que también vera destrozadas sus esperanzas de fundar una….unión con Ucrania y Bielorrusia. Es más, la industria de defensa de Rusia y Ucrania están cercanamente enlazadas.  
Tymoshenko está ahora sirviendo una condena de siete años de carcel por cargos de abuso de poder y malversación.  Su país, mientras tanto, es aún más crucial para los estrategas de la clase dominante, con un ojo hacia una posible Tercera Guerra Mundial.  Los capitalistas estadounidenses constituyen el “poder occidental que planea derrotar a Rusia” como lo dijo Stratfor.  Su primordial comité de expertos es el Concilio en Relaciones Exteriores, el cual es dominado por ExxonMobil y JPMorgan Chase.  La actual página electrónica de Foreign Affairs del concilio resalta dos ensayos de Kennan de 1939 y 1942: “Preparando América Civil para la Guerra” y “Política y Estrategia en la Guerra en Rusia.”
Los Trabajadores de Ucrania Sufren la Miseria del Capitalismo
Lo que los gobernantes omiten de su ecuación es a la clase trabajadora, en Ucrania y en todos los otros lugares victimizados por los imperialistas.  Los trabajadores de Ucrania están sonorizando su insatisfacción con la miseria del capitalismo.  La tasa de muerte en el país excede su tasa de nacimiento; la población de Ucrania ha bajado de su pique de 52.2 millones en 1993 a 45.5 millones hoy.  
Mientras que el desempleo oficial ha fluctuado recientemente entre el 8 y 9.5%, los números actuales del desempleo están más cerca de un 25%.  (Los empleadores ucranianos no reportan los trabajadores despedidos).  Muchas veces los trabajadores no reciben sueldo por meses antes de ser despedidos.  Los salarios son tan bajos que un alto porcentaje de familias necesitan por lo menos 2 asalariados para sobrevivir.  La falta de oportunidades de empleo ha llevado a 4.5 millones de ucranianos -10% de la población – a trabajar en el extranjero.  
Estas condiciones han alimentado las protestas masivas de trabajadores desde el 21 de noviembre, cuando el régimen de Víctor Yanukovich, respaldado por Moscú, suspendió las discusiones de un “Acuerdo de Asociación” con la Unión Europea.  La explotación de los trabajadores ucranianos refleja la lucha mundial por ganancias entre los grandes poderes imperialistas.  En Ucrania pone a los multimillonarios rusos (conocidos como oligarcas) contra sus contrapartes europeos.  Los gobernantes de EEUU apoyan la Unión Europea; Yanukovich representa a los oligarcas ucranianos pro-rusos.  La Ucrania occidental en particular es un hervidero de anti-comunismo, y se le dio mucha publicidad a la destrucción de la estatua de Vladimir Lenin en la capital, Kiev.  
Rinat Akhmetov, el más rico de los oligarcas ucranianos, es dueño de una mansión de $250 millones en Londres y ha sacada la mayor parte de su fortuna, de $15 mil millones, de Ucrania.  Aunque pro-ruso y apoya a Yanukovich parece estar cubriendo sus apuestas.  Recientemente parecía estar a favor de los manifestantes en la Plaza de la Independencia de Kiev.  
Un Patrón Siempre es Un Patrón
Una alianza con la UE es muy popular entre los trabajadores ucranianos, en parte porque la apariencia de falsa democracia de Europa es más apetecible que el abierto fascismo de Putin.  La UE promueve mucho una sociedad civil, transparencia y un estado de derecho.  Mucho de este parloteo viene de los mismos oligarcas quienes obtienen sus fortunas obscenas pisoteando la sociedad y la ley.  Hay poco o nada que beneficie a los trabajadores en el Acuerdo de Asociación.  Es más, ambos, la UE y el FMI (siguiendo el ejemplo griego) están demandando medidas de austeridad estrictas en Ucrania, desde aumento en los impuestos hasta recortes presupuestarios.    
Todos los trabajadores de Ucrania – este u oeste, que hablan ruso o ucraniano, industriales o agricultores – necesitan el comunismo. Ellos no necesitan más explotación de capitalistas dirigidos por Putin o de la pandilla anti-Putin.  Ellos necesitan al Partido Laboral Progresista.  
El Crecimiento del PLP Única Esperanza para Los Trabajadores del Mundo
La lucha por el comunismo es larga y dura, pero es la única solución.  Conforme la rivalidad inter-imperialista nos lleva inevitablemente a una más extensa y sangrienta guerra, y los gobernantes atacan sueldos y nuestras condiciones de vida en todo el mundo, el crecimiento internacional del Partido Laboral Progresista es la única esperanza para los trabajadores del mundo.  Necesitamos extender al PLP a Ucrania para que las ideas comunistas empiecen a enraizarse.  
Mas que nada, debemos reconstruir el movimiento mundial comunista.  En el pasado fue la luz para la clase trabajadora.  Ayudo a contener la explotación asesina del capitalismo.  Derroto el fascismo en la Segunda Guerra Mundial.  Con su retirada, los capitalistas del mundo han tenido mano libre para mutilar y asesinar por sus ganancias.  Un reconstruido movimiento comunista puede tomar el siguiente paso y destruir el capitalismo para siempre.  ¡Extiende el comunismo y construye el PLP en todos lados!