Information
Imprimir

¡Rebelion Multiracial aterroriza Patrones!

Information
13 Noviembre 2014 43 visitas

FERGUSON, MO. — La clase dominante capitalista se ha visto sacudida por las protestas que ya llevan más de dos meses desde el asesinato racista de nuestro hermano de clase trabajadora Mike Brown.  Los rebeldes han demostrado creatividad en su lucha contra el terror policial, que ha incluido la interrupción de juegos de beisbol y una presentación de la sinfónica para mantener la atención en Ferguson.  Un grupo de camaradas del PLP fueron a St. Louis para participar en las más recientes protestas y todos regresaron a sus áreas con nuevas fuerzas y un mejor entendimiento político de porque la clase dominante esta aterrada por esta rebelión.
Los patrones están usando dos tácticas para detener el movimiento: el fascismo descarado y la coaptación liberal. Esto refleja al mismo tiempo una división táctica y una unidad estratégica de la clase dominante. Con la primera táctica, el terror fascista, la clase dominante y sus policías pensaron que podrían aplastar la lucha de los trabajadores y estudiantes en el Condado de St. Louis. Después de semanas de protestas diarias, vieron que subestimaron la determinación de los manifestantes que resistieron la intimidación y el terror, imágenes de las cuales se han visto en todo el mundo. El contingente de nuestro partido vio esto de manera directa.  
El viernes 10 de octubre, la policía anti motines armada con pesados vehículos blindados confrontó cerca de 150 manifestantes en St. Louis durante una marcha por otro joven negro a quien un policía fuera de servicio le disparó ocho tiros después de comprar un sándwich en una tienda. Después que la policía nos hostigara en una marcha al día siguiente, exigiéndonos que les diéramos nuestros volantes y explicaramos quiénes éramos, nos detuvo otra vez la policía del Condado de St. Louis cuando entramos a unos edificios en Ferguson donde vive una mayoría de afro-americanos para hablar con ellos.
Los residentes nos contaron que desde que le dispararon a Brown este hostigamiento había empeorado, y la policía del Condado de St. Louis colaboraba con la policía de Ferguson para patrullar este vecindario de clase trabajadora en su mayoría Afro-Americana. Contrario a nuestra suposición que los residentes de Ferguson estarían reacios o inclusive cansados de nosotros, los trabajadores y estudiantes en los apartamentos estuvieron entusiasmados de hablar con nosotros sobre el comunismo y de recibir el DESAFIO, y algunos inclusive dieron pequeñas donaciones.            
Para suplementar el fascismo descarado, el ala liberal de la clase dominante tiene una táctica más sofisticada – y peligrosa – para evitar que estas rebeliones espontaneas se conviertan en un movimiento de la clase trabajadora más organizado: coaptar las protestas y presentarse como protectores de los residentes Afro-Americanos contra la policía racista y fascista y contra los políticos blancos abiertamente racistas.  
Después que los patrones se dieron cuenta que no podían aterrorizar a los rebeldes y aplastar la rebelión sólo con la violencia, desataron un horda de los mal llamados lideres liberales en las protestas, que de manera agresiva promueven el nacionalismo estadounidense y la política de la identidad racial – en particular, las ideas anti-obreras del “privilegio blanco” y del “poder negro”.  Estas ideas son un ataque ideológico contra la consciencia de clase trabajadora que divide nuestra clase a favor de los patrones que van a necesitar más carne de cañón para las grandes guerras imperialistas que vienen cocinando.
El ala liberal de la clase patronal está promoviendo la demanda por el enjuiciamiento del policía racista Darren Wilson con el propósito de disipar el odio de clase y prevenir una rebelión más grande.  Quieren que los manifestantes acepten una resolución de la situación a través del falso sistema de ‘in’justicia de los patrones y de esa manera restablecer la fe en el sistema – el mismo sistema que asesinó a Mike Brown.
Que la rebelión sea tan multirracial y que haya atraído la participación de Asiáticos, Latinos, negros y blancos, trabajadores y estudiantes de todos lados aterra a los patrones porque ven la posibilidad de que se desmorone su sistema basado en las diferencias raciales. Los patrones liberales han tenido cierto éxito promoviendo la idea entre los manifestantes que sólo las ‘personas de color’ son agredidas, oprimidas y asesinadas por la policía.
 A pesar de que a los afro-americanos los asesinan en mayor proporción que su porcentaje en la población, la mayoría de trabajadores asesinados por la policía son blancos. Desde el 2003 hasta el 2009, hubieron 1,529 afro-americanos y 949 Latinos asesinados por la policía en EEUU, y 2,036 blancos en ese mismo periodo (Estadísticas del Departamento de Justicia, 2011).  Los policías asesinos invalidaron el ‘privilegio de la piel blanca’ de estos trabajadores. Los mal llamados lideres liberales, como los del Colegio de Justicia Criminal de John Jay, quieren reformar la policía sólo para que la disparidad racial no parezca tan descarada, y de esa manera legitimar la violencia policial.
Los trabajadores afro-americanos viven aterrorizados en vecindarios segregados; al mismo tiempo muchos trabajadores blancos también sufren opresión, pero de manera invisible a los medios porque a menudo  se da en apartadas áreas rurales del país. Los comunistas no queremos ‘igualdad’ en el nivel de asesinatos policiales – ¡queremos aplastar el terror policial!        
Nos opusimos a los liberales de manera militante con nuestra osada presencia en cada marcha, y a través de nuestra interacción con los otros manifestantes y trabajadores. Nos acercamos a ellos sinceramente y buscamos puntos de unidad en su visión política para ayudarlos a que desarrollen ideas comunistas. Lo esencial para nuestro éxito fue nuestra organización y disciplina en las discusiones y en la crítica de nuestras actividades de manera centralista democrática, y poniendo en práctica las lecciones en nuestros planes futuros.
A pesar de que tuvimos que luchar contra el cansancio y enfermedad, esto le dio a nuestro grupo una tremenda energía. Organizamos dos discusiones grandes, una con universitarios interesados y otra con un grupo de contactos que hicimos y que querían discutir nuestras ideas, que nos llevó a hacer nuevos amigos y explicar mejor nuestra lucha.
Nuestro contingente del PLP, multirracial, inmigrante y nativo, fue una muestra visible de internacionalismo. Dijimos claramente que es imposible lograr verdadera justicia en este sistema criminal y sólo una revolución comunista, que derroque a toda la clase dominante y su estado, puede darnos una justicia verdadera. Gracias a nuestros nuevos amigos y contactos con los trabajadores y estudiantes allá, y a través de nuestra experiencia interna organizando y llevando nuestra línea política a miles de trabajadores y estudiantes, ese día está más cercano.