Cualquiera que pase por ahí a las 8 de la mañana podrá ver una variedad de estudiantes entrando a una escuela pública, pero es ahí donde la diversidad termina. La mayoría de los estudiantes negros y latinos, y muchos blancos de clase baja, tienen menos acceso a los recursos. Estoy librando una lucha alrededor del programa bilingüe que, hasta cierto punto, está promoviendo la segregación por raza, clase y etnicidad.
Segregación Jim Crow, en su nueva forma
En 1954, la Suprema Corte de EE.UU. decide que la segregación en las escuelas debe terminar pues, “separados” significaba, esencialmente, desigualdad. Revirtiendo el mandato de los gobiernos anteriores, de segregar instalaciones, convirtiéndolo en un paso histórico que alejaba del racismo institucional.
Pero los capitalistas necesitan dividir a la clase trabajadora para explotar más eficazmente a nuestra clase. Por eso el sistema escolar creó nuevas formas internas de segregación. La más común es la “trayectoria de aptitud” dentro de la escuela. Los padres con dinero son por lo general blancos y pueden ofrecer más opciones a sus hijos, como tutoría, a lo cual los hijos de obreros por lo general no tienen acceso. A estos estudiantes se les determina como ‘avanzados’ por sus calificaciones y evaluaciones de consejeros.
Los gobiernos locales también han mantenido la segregación utilizando políticas de “escuelas de barrios”, reflejando los patrones de vivienda segregada de casi todas las comunidades. Durante la década de 1960 y 1970, cuando se demandó el transporte de estudiantes para sobreponerse a los patrones racistas, los patrones utilizaron el miedo para aumentar las actitudes racistas de los padres blancos, dividiendo aún más a la clase trabajadora. Hoy, casi todos los programas han terminado, las escuelas están cada vez más segregadas por raza y etnicidad. Los niños de familias pobres, quienes son en su mayoría negros, latinos y/o inmigrantes, terminan con menos recursos en sus escuelas y menos oportunidades para el éxito en el futuro.
La Educación bilingüe destrozada por el racismo
La capacidad lingüística, y en general todo lo que aprendemos, es más fácil durante el proceso de inmersión dual, donde la mitad del día se enseña en español y la otra mitad en inglés, con estudiantes de ambos grupos.
La población escolar en la primaria donde doy clases es de 75% migrante, de ellos, el 65% son latinos. Se estableció un programa de ‘inmersión parcial’ dirigida a estudiantes cuyo primer idioma es inglés. Se utilizó el español para ensenar matemáticas y ciencia. Los estudiantes aprendieron estas asignaturas además de aprender el español. El programa fue diseñado para atraer a los estudiantes blancos y de dinero. Se negó acceso al programa a los niños cuyo primer idioma es español. A los estudiantes latinos solo se les dio clases en inglés, a pesar de los extensos estudios que demuestran que el conocimiento básico del idioma nativo mejora el progreso académico.
La política racista de negarle el acceso al programa a las familias latinas, termino cuando unos cuantos maestros y madres antirracistas protestaran contra esto. Demandábamos un verdadero programa bilingüe, inmersión dual, pero los que crean las políticas mantuvieron la segregación diciendo que había problemas de presupuesto.
La segregación también apareció en los programas de matemáticas avanzadas. Al principio este programa especial era 90% blanco, aun cuando la población escolar blanca es de 15%. Las madres y maestros lucharon, forzando a la administración a inscribir más niños de color. La lucha fue ardua porque la segregación étnica y racial esta enraizada profundamente en el ADN del capitalismo.
El programa de inmersión parcial segrega a los niños por lenguaje desde la edad de cinco años. Ellos aprenden desde pequeños que el sistema escolar público está diseñado solo para algunos. Esto contradice la idea de que en Estados Unidos el sistema esta diseñado para educar a todos. La gente se pregunta: ¿Por qué las escuelas reprueban a nuestros hijos? ¿Por qué las escuelas les niegan las oportunidades a los niños pobres? ¿Por qué estamos estancados en la miseria? El sistema de educación refuerza las desigualdades generadas por el capitalismo.
Los departamentos de educación hablan por hablar. Hipócritamente demandan que los maestros “cierren la brecha del éxito” y que demuestren “aptitud cultural” sin embargo las políticas que crean son racistas y divisorias.
Una amarga reforma
Nuestro condado ha comenzado un programa de inmersión dual, donde el 50% hablan inglés y el 50% hablan español, estarán en las mismas clases y recibirán las clases mitad en inglés y mitad en español. Esta es la mejor manera que los niños aprendan ambos idiomas y tengan éxito académico. Si se implementa correctamente, todos los niños ganarán. En teoría, los niños latinos podrían desarrollar el conocimiento en su idioma natal y los antirracistas deberíamos estar contentos. Tendremos el programa bilingüe que hemos demandado. Sin embargo, las reformas capitalistas siempre son amargas. El programa de inmersión parcial que había atraído a familias adineradas a nuestra escuela, va a ser llevado a un barrio más afluente, en donde todo el día será en español. Por lo tanto, la segregación prevalece y la disparidad en recursos crecerá. La posibilidad de que nuestra escuela se integre en términos de raza, etnicidad, estatus migratorio, nuevamente se aleja.
Se requiere un cambio revolucionario
Los comunistas en las escuelas debemos luchar contra todas las formas de segregación porque debilita a todos los estudiantes y sus familias obreras en la lucha de clases. Los maestros debemos resistir todas las fuerzas que siguen segregando nuestras escuelas. Debemos construir una base con madres de todas las razas/etnicidades, y utilizar todas las batallas para crear un movimiento para mejorar la educación y por último un nuevo sistema, comunismo. Entonces las posibilidades de que nuestros niños florezcan serán infinitas.