Los Ángeles—Cuando los patrones estadounidenses extendieron la guerra en el Medio Oriente al apuntar la clase gobernante de Siria y moviendo a Los Estados Unidos en un más directo conflicto militar con los patrones rusos, 3 estudiantes de una universidad local de salud se presentaron con preaviso de un día para reunirse con el Partido Laboral Progresista (PLP) marchando al centro contra la guerra. A diferencia de la marcha anterior contra la violencia con armas o la marcha de mujeres que atrajo a miles de trabajadores no afiliados, la mayoría de trabajadores que se reunieron a la manifestación de Coalición ANSWER estuvieron con falsos grupos de izquierda. Un grupo pequeño de trabajadores sirios actualmente apoyaron a la clase gobernante sirio, cargando una bandera siria y pancartas grandes de Assad. Es claro, el partido demócrata y sus vende obrero sindicales quienes están batallando en construir el patriotismo para mandar a tropas terrestres al Medio Oriente y otras partes no van a invertir millones de dólares para apoyar un movimiento anti-guerra como lo había hecho en marchas anteriores mencionadas.
De hecho, la excusa de Trump en bombardear a los trabajadores sirianos, siguiente el presunto uso de armas químicas, en realidad fue en respuesta a la “línea roja” que Obama puso durante su presidencia. Con aviones de reacción rusos, tanques, y tropas terrestres, esto marca la primera vez que un poder imperialista extranjero ha puesto pie en el Medio Oriente – los Estados Unidos siendo la excepción – desde la segunda guerra mundial. Mientras la hegemonía global estadounidense y el control de petróleo del Medio Oriente han continuado a debilitarse desde su fracasado guerras en Irak, esta nueva presencia de patrones rusos es otro indicio de que una guerra más grande es inminente. Menos que de una invasión militar con los Estados Unidos y probable tropas de la Unión Europea, su agarre regional y poder global estadounidense disminuirá aún más. No podemos pronosticar cuando o en donde, pero si es un pendiente resbaladiza a la tercera guerra mundial. Nuestra participación en el movimiento actual es crucial, en particular para los trabajadores negros, latinos, inmigrantes y musulmanes mayormente ausentes en el movimiento anti-guerra durante los años Bush. Los patrones racistas estadounidenses sacrificarán a estos trabajadores primero en la primera línea frente por las ganancias patronales.
Así, fue un evento significante en que tres futuros trabajadores negros de cuidado de salud, uno siendo veterano de la guerra Irak, marchó con nosotros (PLP) y trajo un mensaje revolucionario al grupo pequeño. Estos tres amigos del Partido han participado en grupos de estudio del Partido y eventos sociales después del Primero de Mayo. El plan es de reclutarlos a un club. Es un desarrollo modesto pero significante para nuestro trabajo en Los Ángeles. También es un testimonio que aunque dentro de este periodo de guerra y fascismo, podemos mover a nuestra clase, aunque sea en números pequeños, por ahora. Así como estos nuevos bombardeos en Siria puede ser un derrame rápido a una tercera guerra mundial, nuestro pequeño trabajo ahora, puede conducir un aumento de crecimiento para nuestra organización, y la lucha por el comunismo.