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Nicaragua: División de los patrones se aprofundiza, izquierda falsa le falla a los obreros de nuevo

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17 Mayo 2018 84 visitas

Las consecuencias de la rivalidad inter-imperialista han golpeado duramente a la clase trabajadora internacional, esta vez en Nicaragua. En el ultimo mes, miles de estudiantes han protestado contra los planes de recortes al seguro social y el aumento a los impuestos de salarios. Daniel Ortega, presidente de Nicaragua, ha respondido con terror estatal, cuyo resultado ha sido; 63 muertos y cientos de heridos y la demanda masiva de su renuncia.
La historia de la clase dominante nicaragüense, y sus intereses imperialistas en la región muestran las raíces de la actual crisis.
Nicaragua atrapada en centro imperialista
Desde la conquista española del siglo 16 Nicaragua se ha posicionado en el centro de la rivalidad imperialista, debido a su lugar geográfico, un puente entre dos océanos, Atlántico y Pacifico. Los Marines estadounidenses invaden Nicaragua en 1912, después que los patrones alemanes y japoneses amenazaran con construir un canal para competir con el Canal de Panamá, controlado por EE.UU., y se quedan en el país hasta 1933.
Hoy, aunque EE.UU. sigue siendo el imperialista dominante en Centro América y el Caribe, el año pasado tubo $80 mil millones de intercambio comercial, su posición continua debilitándose frente a los patrones chinos y rusos (Bloomberg News, 5/6/2017). China considera América Central como parte de su “Nueva Ruta de Seda”, un plan de dominio económico, invirtió miles de millones en un canal de competencia, que se estanco debido a protestas por los desalojos de los trabajadores. En 2016, Rusia atraco sus barcos de guerra en la consta nicaragüense y vendió al régimen de Ortega 50 nuevos tanques y aeronave a cambio del acceso a su espacio aéreo y puertos. Además, la clase dominante rusa construye un centro del orden publico cerca de la costa del pacifico nicaragüense (Miami Herald, 15/9/2016).
Estados Unidos ha respondido de la misma manera a China y Rusia. En 2017, el congreso estadounidense paso la ley Nicaraguan Investment Conditionality Act (NICA), la cual amenaza recortar la ayuda foránea, simultáneamente conducían ejercicios navales de invasiones fingidas a 13 países, entre los cuales estaba Nicaragua, desafiando las demandas marítimas chinas (Asia Times, 26/4/2016).
 Desde 1936, los patrones estadounidenses tratan de congelar a sus rivales imperialistas; cuando la clase dominante estadounidense instalo a la familia Somoza, como brutal dictadura, representando a ricos latifundistas. Mientras tanto, en los siguientes 43 años, EE.UU. saqueaba los recursos de Nicaragua.
Falsos Izquierdistas Sandinistas
En 1979, el control estadounidense recibió un gran golpe con la revolución “socialista” sandinista, dirigida por el falso izquierdista Ortega. Bajo la presidencia de Ronald Reagan, EE.UU. canalizo dinero y drogas a la CIA para financiar a los rebeldes Contras. El terror derechista de estos grupos instigo una guerra civil que asesino a unas 50,000 personas (Washington Post, 10/6/04). En 1990 cuando Ortega pierde las elecciones, él y su esposa, la actual vice presidenta, Rosario Murillo, se reinventaron. En 2006, se asocian con Jaime Morales, antiguo líder Contra, para regresar al poder. Al ganar, “lo primero que hará la administración será hablar inmediatamente con empresarios para mantener la confianza y asegurarles que todo estará bien” (The Guardian, 8/11/06).
Socialismo financiado con petróleo
Ortega formo rápidamente una alianza con el entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez, construyo una red de negocios financiados por el petroleo, y se unió al bloque comercial de Chávez, en oposición directa a los patrones estadounidenses. Según el banco central de Nicaragua, Venezuela le dio a Nicaragua $457 millones en ayuda, a través de una compañía manejada conjuntamente por ambos países. La familia de Ortega sustrajo la mayor parte de su fortuna para consolidar su poder. En 2009, moviéndose claramente hacia el fascismo, la corte suprema de Nicaragua y el supremo consejo electoral desvanecen los obstáculos constitucionales para que Ortega pueda quedarse otro periodo en el poder. Eficazmente eliminando la oposición de otros partidos políticos (BBC News 7/11/11).
Para 2015, con el colapso de la economía venezolana y la perdida del barato crédito petrolero venezolano, EE.UU. se convierte en el principal proveedor de petróleo de Nicaragua. Por lo tanto la clase dominante nicaragüense es forzada a acumular dólares estadounidenses para pagar por anticipado. Esta crisis económica desencadena la ultima crisis política, ya que los patrones nicaragüenses tratan de resolver sus problemas a costa de los trabajadores.
Los trabajadores no se han quedado quietos ante estos ataques. En 2015, miles de pequeños agricultores protestaron el acuerdo de Ortega con los multimillonarios chinos para construir un canal atravesando Nicaragua. En la primavera de este año, estudiantes y trabajadores militantes se tomaron las calles luchando contra la policía y las pandillas fascistas Sandinistas de Ortega, quienes han estado apedreando manifestantes.
Protestas patrocinadas por EE.UU.
Mientras Ortega se acerca a los patrones rusos y chinos, parece que los gobernantes estadounidenses financian la resistencia estudiantil. El North American Congress on Latin America (NACLA) anoto, “El movimiento 19 de abril comparte muchas características con…los movimientos de la Primavera Árabe, Occupy Wall Street y Black Lives”(14/5).
Según el New York Times, todos estos movimientos han sido financiado por la CIA y grupos pro imperialistas como el National Democratic Institute y la Freedom House de George Soros (New York Times, 14/4/11). Lo mismo con la revolución en Georgia, Ucrania, y Kirguistán, las cuales en general fallaron en deponer a las facciones pro rusas de la clase dominante (Center for Strategic and International Studies, 28/5/14).
Las profundas divisiones dentro de la clase dominante nicaragüense probablemente llevaron al cambio del Consejo Superior de Empresas Privadas (COSEP), que al principio apoyo a Ortega, para organizar una marcha estudiantil el 22 de abril. El 23 de abril, la embajada estadounidense cerro sus operaciones en Managua (NACLA, 14/5).
Trabajadores nicaragüenses necesitan el comunismo
Aunque Ortega se ha retractado de la propuesta de recortes al sistema de seguridad, las protestas han continuado en todo el país. La clase trabajadora nicaragüense sabe que el FSLN los vendió hace mucho tiempo, el partido político fundado por los sandinistas, que se basaba en la estrategia anti-revolucionaria de la unidad de todas las clases. Desde el principio este movimiento sudo izquierdista se alineo con los intereses comerciales y de la iglesia reaccionaria nicaragüense; jamás tuvo intenciones de compartir poder y fortuna con la clase trabajadora. Nicaragua es otro ejemplo del impacto nocivo del colapso del viejo movimiento comunista en Rusia y China. Hoy, mas que nunca, la clase trabajadora necesita un partido comunista masivo.
Sin el liderato y las ideas comunistas, la rebelión en Nicaragua será a lo sumo otro movimiento patrocinado por los patrones y bajo su control, como la Primavera Árabe en Egipto. Pero, el espíritu de lucha de los trabajadores sigue vivito y coleando, el Partido Laboral Progresista lucha para extenderlo a todos los países del mundo. Nuestra lucha no será para quitar políticos, sino por la destrucción del sistema capitalista y el fin de la opresión de todos los trabajadores del mundo.