PAKISTÁN, 6 de agosto—Una ola de coacción por parte de las agencias de inteligencia, judiciales, militares y servicios secretos ha acomodado las elecciones generales a favor de Tehreek-e-Insaf (PTI) de Pakistán y su líder Imran Khan. El PTI tiene 174 escaños en el parlamento, formando efectivamente una mayoría absoluta. La lucha interna de los patrones se juega a espaldas de la clase trabajadora aquí. Pakistán, una potencia nuclear y el sexto país más poblado del mundo, se posiciona en el punto de mira de una rivalidad entre Estados Unidos y China (ver editorial en la página 2). El resultado del país tiene ramificaciones para la clase trabajadora internacional.
El Partido Laboral Progresista está poniendo nuestra línea revolucionaria de “no votar---rebelarse” ante las masas. La clase trabajadora necesita organizarse bajo nuestra bandera roja para deshacerse de este bárbaro sistema capitalista luchando por una revolución comunista internacional.
Terror contra clase obrera
Diferentes grupos están ejecutando ataques terroristas. Doscientas personas inocentes han muerto en los primeros 15 días de julio. No es raro que el partido perdedor acuse al partido ganador de manipular las elecciones y fomentar protestas violentas en las calles.
Estos asesinatos han proporcionado la excusa para que los militares desplegasen 371.000 tropas a fin de garantizar una elección “justa y libre”.
“El ejército estaba empeñado en asegurar la victoria de Khan e incluso alentó a los partidos políticos con vínculos a grupos terroristas a presentar cientos de candidatos, junto con unos 1.500 candidatos vinculados a los partidos islamistas de derecha de Pakistán” (Foreign Affairs, 27/07).
El ejército arrestó y amenazó a sus rivales políticos, incluyendo a la Liga Musulmana de Pakistán (Nawaz), en los meses previos a las elecciones. También han trabajado para descalificar candidatos de PML-N. El PTI representa a los capitalistas, feudalistas, empleados religiosos y funcionarios jubilados apoyados por el estado. Abandonado con pocas opciones, el ejército apoyo a Khan y su partido PTI.
Ningún partido capitalista es bueno
Los patrones capitalistas intentan difundir la ilusión de que “el capitalismo es bueno pero el partido gobernante es malo, así que la gente necesita traer un nuevo partido para gobernarlos”. Pero en el Partido Laboral Progresista estamos exponiendo las intenciones de los patrones de mantener intacto el sistema capitalista culpando a uno u otro partido gobernante.
Hubo censura de los periódicos, las redes sociales y los canales de televisión. El nivel de interferencia e ingeniería política no tiene precedentes”, dijo la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán. La Oficina Nacional de Responsabilidad ha sido descrita como utilizada por el estado para poner a los políticos en línea al amenazar con llevar casos de corrupción en su contra.
El material de campaña de la PML-N fue presuntamente destrozado por las autoridades mientras que dejaron intactos los materiales de la campaña de PTI. Ha habido sugerencias de que los candidatos que pertenecen a PML-N han sido forzados a cambiar de partido.
Punjab es la provincia más poblada y sigue siendo clave para las elecciones. En el último día de escrutinio de los documentos de nominación, siete candidatos de PML-N del sur de Punjab devolvieron sus boletos sin dejar ninguna opción para los candidatos de reemplazo del PML-N. Este movimiento les impidió la oportunidad de ganar esos escaños. También ha habido informes de ingeniería electoral en todas las provincias. Esto no es nada nuevo; sucede en todas las elecciones porque los capitalistas siempre manipulan las elecciones y administran sus partidos de acuerdo con sus intereses.
Los patrones intentan enfatizar que su sistema capitalista es viable, pero el último partido gobernante y su liderazgo eran corruptos, por lo que no pueden traer cambios en sus vidas, pero si esta vez votamos por un nuevo partido, entonces podemos traer el cambio. ¡Qué basura! En realidad, el capitalismo hace que todos en la clase dominante estén podridos. El sistema solo produce explotación, pobreza, desigualdad e injusticia. Solo la revolución comunista es una salida de este infierno y el PLP se esfuerza por ganar a las masas con la idea de que las elecciones no son una solución para nuestros problemas.
Las Cortes protegen el terrorismo patronal
Los tribunales y la agencia de inteligencia han estado trabajando con los militares para elegir a Khan. En 2017, se lanzó una investigación de corrupción del primer ministro Nawaz Sharif. En respuesta a esto, la Corte Suprema destituyó a Sharif descalificándolo de ocupar el cargo de conformidad con el artículo 62 de la Constitución.
Las autoridades también lanzaron una investigación antiterrorista contra líderes de PML-N y abrieron causas penales contra casi 17.000 miembros del partido. Los tribunales están activamente en contra de este partido político para que no gane las elecciones.
 El PTI recientemente entregó 300 millones de rupias a la Madrassa e Haqqaniya, una escuela religiosa que es una fábrica de terroristas. Produjo a todos los terroristas que lucharon contra la URSS y ahora está produciendo “buenos terroristas” para matar a la gente progresista y de la clase trabajadora). El terrorismo es, por supuesto, respaldado por el estado. Se espera que tres partidos políticos terroristas se alíen con Imran Khan.
¡No votar---rebelarse!
Los camaradas están explicando que el estado paquistaní está bajo el control de los brutales patrones capitalistas. Es por eso que nadie puede hablar en contra de la narrativa de las organizaciones terroristas; nadie puede plantear una pregunta sobre los problemas de seguridad internos y externos; y nadie puede hablar en contra de la falsa ideología de las organizaciones islamistas. Los trabajadores no tienen derecho a discutir el comunismo o a criticar el capitalismo o a hablar de laicismo. Pero los fundamentalistas tienen derecho a matar a cualquiera, en cualquier lugar y en cualquier momento. No hay seguridad para la clase trabajadora: los extremistas los matan para propagar el terror en todo el país.
Estamos hablando en contra de las elecciones con el lema “No votar---Rebelarse” y convencer a las masas de forjar una lucha por una revolución comunista internacional bajo la bandera roja del PLP.
Los patrones capitalistas están confundiendo a la clase trabajadora al darles la oportunidad de votar para cambiar a sus amos. Ningún jefe tiene una agenda para traer prosperidad, igualdad y justicia en la vida de los trabajadores. Los camaradas acercan a la clase trabajadora a nuestra línea al exponer la realidad de las elecciones y la necesidad de la revolución. ¡Qué viva la revolución comunista internacional y el PLP!