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Nuevo trato verde Los patrones liberales empujan el fascismo

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24 Marzo 2019 43 visitas

Millones participaron en las huelgas del Cambio Climático que se dieron el 15 de marzo por los jóvenes en docenas de países porque están asqueados de la destrucción del mundo natural por capitalismo. Masas de personas se tomaron las calles por todo Europa, Chile, India, Kenia, Sudáfrica, Nueva Zelanda y muchos países mas. Para darnos cuenta del poder que tiene la clase trabajadora al unirse y luchar por un mundo mejor, tenemos que liberarnos del movimiento del cambio climático patronal.  En movimiento ambiental lo esta liderando y promoviendo el ala principal de los patrones estadounidenses y sus aliados en Europa, quienes avanzan hacia el fascismo para controlar la creciente amenaza al orden mundial liberal.
Estos asesinos que hoy están en la cima capitalista mundial, quienes han saqueado la tierra mientras que en el proceso destruyen a miles de millones de trabajadores, siempre sacrificaran el ambiente de la clase trabajadora para preservarse ellos y su poder. Solo un poder comunista trabajador podrá construir una sociedad que sirva a las necesidades de la clase trabajadora.
Alexandra Ocasio-Cortez, al servicio de Nancy Pelosi y sus patrocinadores capitalistas, buscan una ventaja ambientalista para extender su base de apoyo al ala principal de la clase dominante estadounidense y al mismo tiempo poner en línea a políticos renuentes a las necesidades de estos patrones estadounidenses fascistas. El Nuevo Pacto Verde de Ocasio-Cortez (GND, siglas en ingles), es una, según sus propios organizadores, apuesta hacia la reorganización de las sociedad estadounidense basándose en un permanente estado de guerra – “El Nuevo Pacto Verde esta basado en la premisa de que Estados Unidos hoy, se enfrenta al ‘equivalente moral de la guerra’ debido a sus dos crisis, el cambio climático y la creciente desigualdad de sueldos”. (newconsensus.org)
Esta misma clase dominante que lanzo bombas nucleares contra Japón, roció Vietnam con napalm y el agente Naranja, enveneno a Irak con uranio, ahora quiere que nos traguemos su “movilización en estado de guerra” con el nombre de protección ambiental y justicia social.  Ellos crearon los canceres en Gary, Indiana y no les importa el agua con plomo los niños toman en Flint. Los únicos intereses que los capitalistas estadounidenses protegen, ¡son los suyos!
Ya hemos escuchado esto de parte de los liberales en Washington, y siempre ha llevado a décadas de guerra.
Reaccionando al embargo petrolero árabe que sacudió al imperialismo estadounidense en la década de 1970, el entonces presidente Jimmy Carter anuncio en 1979; “Debemos enfrentar este problema energético en pie de guerra…[es] el equivalente moral de una guerra”.  Poco después anuncio la “Doctrina Carter”, fijando una política de exclusividad estadounidense sobre el petróleo del medio Oriente, iniciando una era de masacres indiscriminadas de trabajadores musulmanes, de la cual aun no hemos salido.  
Las políticas climáticas que estamos viendo serán utilizadas para disciplinar a políticos que muestren señales de no estar a tono con las necesidades de los patrones, la necesidad urgente de reorganizar fundamentalmente a la sociedad preparándolos para un conflicto con sus rivales imperialistas. En una grabación con un teléfono celular, que se virilizo en el internet, la senadora Diane Feinstein de California, es enfrentada, en su oficina, por niños y jóvenes amonestándola por no votar a favor del Nuevo Pacto Verde.
El “Movimiento Amanecer” que organizo la emboscada a Feinstein, nombra en su pagina principal a los hermanos Koch, como una compañía de combustible fósil que tiene que ser desmantelada; algunas voces mas fuertes en su demanda por un GND, hacen un llamado a la nacionalización de compañías energéticas que rehúsen unirse al programa, y hasta se ha demandado que los altos ejecutivos de estas compañías sean juzgados por crímenes contra la humanidad (thedig,podcast, 27/12/18).
“Fostress America” tiene ahora mas influencia en la Casa Blanca de Trump que cualquier otra. Es una organización domésticamente orientada hacia una pequeña ala fascista de la clase dominante estadounidense, tipificada pero no liderada totalmente por los hermanos Koch. El ala principal de la clase dominante estadounidense, mas internacionalmente orientada, deberá construir un movimiento político para aplastar a sus rivales, y el ambiente se esta convirtiendo en una gran estrategia de estos imperialistas liberales. Los acuerdos como los de Paris, se alinean con los intereses de las grandes compañías energéticas cuyos intereses le permiten aislar a los mas pequeños patrones energéticos relacionados a la industria del carbón y otros concebidos métodos de producción.
“Para ConocoPhillips y Exxon – igual que para las grandes petroleras no estadounidenses como BP, Royal Dutch Shell, Eni, Total, y Statoil – apoyar los acuerdos de Paris no es solamente seguir una tendencia sobre los negocios conscientemente ambientalistas. Estas compañías con operaciones en todo el mundo se beneficiaran de los acuerdos de Paris porque al cortar las emisiones de carbón en las naciones, llevara a la transición de plantas alimentadas por carbón a plantas alimentadas por petróleo. Y el gas natural es una porción substancial de estos grandes negocios, inversiones y ganancias” (oilprice.com 17/5).
Si el pionero de la ‘tecnología verde’ Tesla es nuestro ejemplo, las promesas de AOC de un capitalismo amigo del ambiente y orientado hacia la justicia social es un sueño imposible y le Nuevo Pacto Verde solo significara una farsa de bienestar corporativo que solo beneficiara a la nueva clase dominante “verde”. Gozando del regalo de aproximadamente 5 mil millones en subsidios federales, Elon Musk, ejecutivo de Tesla esta valorado en $20 mil millones (y se proyecta llegar a los $55 mil millones) mientras que su compañía recientemente despidió a 3,000 trabajadores, es decir el 7% (wired.com 18/1) entre ellos organizadores sindicales, todo para mantener un margen de ganancias mas alto (cnn.com 26/10/17).
El plan alterno es el comunismo – una economía planeada es el único camino hacia un futuro sostenible para los trabajadores del mundo. Solo una dictadura internacional del proletariado podrá erradicar el mas grande peligro: la guerra imperialista. Solo el poder comunista de los trabajadores podrá reducir las emisiones de carbón de manera equitativa globalmente. El imperialismo amenazan con la guerra nuclear y deja a los trabajadores que el capitalismo empobreció atrapados en el subdesarrollo.
Los patrones estadounidenses utilizan la política ambientalista para imponer un plan económico estilo segunda guerra mundial, donde las ganancias manan hacia una unida y disciplinada clase dominante equipada para la guerra mas letal de la historia. Las movilizaciones políticas en el GND insinúan la clase de política y promesas que necesitan generar hacer la guerra con apoyo masivo. Millones son engañados por el nacionalismo inherente en los planes patronales y nosotros debemos estar preparados para mas fascismo. La lucha para construir un movimiento comunista que lleve a nuestra clase a un mejor futuro no puede esperar.  El igualitarismo, pro obrero y pro planta que también mueve a estas millones de personas solo podrá ser traicionado por la arremetida hacia el lucro total y a guerra que el capitalismo nunca, en toda la historia, ha podido evitar.
Solo una clase trabajadora comunista internacional podrá tomar los medios de producción y abolir este horroroso desperdicio de, primero que nada, las vidas de nuestros hermanos y hermanas de clase, de los recursos del planeta, y del modo de producción del capitalismo.  Necesitamos un nuevo sistema rojo, no un nuevo pacto verde; el comunismo es ese sistema. ¡Únete al PLP!