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Patrones de maquilas ponen ganancias sobre la salud de los trabajadores

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16 Mayo 2020 103 visitas

En caso de padecer una pandemia bajo el comunismo la producción pararía inmediatamente, porque las necesidades de la clase trabajadora estarían por encima del sistema de producción, en el capitalismo sucede lo contrario, las necesidades del capital están por encima de los trabajadores. En México, la mayor industria manufacturera se encuentra asentada en los estados fronterizos del norte, en donde existen alrededor de  914 empresas, casi todas de inversión extranjera (jornada 4/24), tan sólo en Ciudad Juárez existen 367 empresas que proveen de 300 mil empleos. De estas, 68% no ha parado de trabajar a pesar de que  desde el 31 de marzo el gobierno decretó el cierre de todas las industrias no esenciales, los patrones no han dejado de exigir a los trabajadores que asistan a las maquiladoras, minimizando el riesgo de contagio incluso ridiculizandolo como psicosis y paranoia, sin embargo, las estimaciones del gobierno federal el pico de la misma ya es inevitable (jornada 04/17).
Dentro de las poblaciones más afectadas por covid-19 se encuentran Tijuana y Mexicali en Baja California, Ciudad Juárez en Chihuahua y Matamoros y Reynosa en Tamaulipas. En Baja California y  Chihuahua  el  contagio más severo empezó en los trabajadores de la salud, enfermeras y médicos a quienes no se les proporcionó el equipo de protección necesario. (el herald de juarez 01/20)
Baja California ocupa el tercer lugar de mayor contagio en todo el país con 1075 casos y más de 100 muertos por covid-19, mientras Chihuahua registró 193 casos con 36 muertes y Tamaulipas registró 295 casos de contagio. Las inconformidades y denuncias por parte de los trabajadores no se han hecho esperar a través de manifestaciones (jornada 04/17) y denuncias ante la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS)  la cual no se da abasto para supervisar y sancionar a las empresas que incurren en estas anomalías, algunas de las denuncias de los trabajadores son: que algunas fábricas están trabajando con nulas o mínimas condiciones de seguridad, otras fábricas han condicionado la cuarentena a sus trabajadores  quitandoles el sueldo o diminuyendoselos, otras tantas solo han cerrado cuando muere algún trabajador, pero el contagio colectivo ya se dio. Algunos patrones con total cinismo argumentan que los obreros se niegan a trabajar pese a que se han otorgado medidas de seguridad como repartición de gel desinfectante, guantes, cubrebocas, así como  la toma de temperatura al entrar a las naves, estas medidas  son solo  para garantizar su producción y no salud de los trabajadores.
Estas empresas no paran porque hay un componente que determina las prioridades de los patrones bajo este sistema: el sistema de ganancias. En el sistema capitalista no se puede parar la producción, debe continuar aún a costa de  la vida de las personas, para las empresas solo importan la mano de obra barata y calificada, que es lo que obtienen estas empresas extranjeras y nacionales asentadas en el norte del país. Tan solo en Tijuana se estima que se genera alrededor de 80 millones de pesos diarios. La respuesta de los patrones ante la denuncia de que sus fábricas representan un foco de contagio, ha sido bajar la velocidad en las líneas de producción para disminuir el número de empleados en las naves, quienes en promedio ganan 170 pesos (7 dólares por día.)
 La población que habita la frontera norte de México, ha mantenido estrechas relaciones de trabajo y de convivencia por décadas, el flujo de personas que viven y trabajan entre uno y el otro lado de la frontera es constante para trabajar o estudiar, se calcula que hay entre 70 y 100 mil personas circulando entre ambos países.  Las fronteras  sirven para dividirnos y controlar el precio de la mano de obra, las mercancías siempre podrán cruzar y el capital de las empresas también, en el comunismo no habrá fronteras, lo primero será garantizar la vida digna de los trabajadores.
Cabe recordar que durante el sexenio de Vicente Fox, cuando el  tratado de libre comercio con Estados Unidos y Canadá impulsa el plan puebla panamá, se impulsó la instalación de un corredor de maquilas en la frontera norte de México, para beneficiar  la  deslocalización de varias empresas estadounidenses principalmente, que buscaban la mano de obra más barata y poca regulación laboral, ante esto organismos institucionales como STPS, no pueden hacer nada aunque saben de las anomalías en la que se encuentran los trabajadores.
Aunado a la pandemia por COVID 19, hay que sumar la migración y la vulnerabilidad en la que se encuentran las personas en busca de una vida mejor. En la frontera norte existen una decena de albergues de migrantes que se encuentran esperando la resolución a  su petición de asilo al gobierno de EEUU, mismas que han detenido sus labores mientras los deportados siguen llegando y se vuelven fuente de contagio para estos albergues que no tienen ni las condiciones ni el personal suficiente para dar atención a todos los que permanecen ahí.(el pais 03/20).