CIUDAD DE NUEVA YORK—Cuando el reloj dio las 12 am el 26 de abril, los Trabajadores de posgrado de la Universidad de Nueva York (NYU) llevaron su trabajo que sostiene la universidad en paro y se tomaron las líneas de piquete. Estas acciones vinieron después de 10 meses de negociaciones no exitosas con NYU por un salario básico, cuidado de salud económica, y protección para estudiantes internacionales, para nombrar algunas cosas. NYU se tiene una dotación financiera de $4.7 billones y es uno de los propietarios más grandes desarrolladores inmobiliarios en el Estado de Nueva York respondió, juzgando la huelga como “injustificada, prematura, y desafortunada.” Para la universidad, los estudiantes de posgrado se ganan $20/por hora, hasta 20 horas/por semana. “son las mejores pagadas en EE.UU.” (https://bit.ly/3b5g4Mo)
Animados, los estudiantes de posgrado están exigiendo que la universidad actué apropiadamente. Consignas como “¿Qué da asco? ¡Romper el Sindicato! ¿Que es inaceptable? ¡Los salarios de NYU!” llenaban el ambiente mientras se hacían discursos conmovedores capturando los corazones de asistentes y espectadores curiosos. Las demandas del acuerdo son progresivas en sí: resaltan el entendimiento de los obreros de posgrado de la base del racismo y sexismo que define la estructura del capitalismo. Se están haciendo llamados de que NYU ya no tenga enlaces con NYPD (La policía de Nueva York), hace una llamado para proteger estudiantes internacionales de ICE (servicio de inmigración y aduanas) y de otros agentes de Control de Fronteras, y llamando el apoyo para los obreros con familias.
Hasta ahora la huelga esta funcionado: NYU ha hecho concesiones. Se necesita más presión de estudiantes y animadores al igual ya que la universidad se está reusando en ceder en varias claves de los problemas como los salarios (en un momento la universidad ofreció un aumento insultante de $1), exención de matrícula para estudiantes de maestrías, y sus lazos con NYPD. Desafortunadamente, los huelguistas continúan impávidos, en la mesa de negociación y la línea de piquete. Han obtenido atención del senador demócrata, Bernie Sanders, candidato de alcaldía, Diana Morales, y otros políticos liberales. Aunque apoyo de estos políticos certifican la fuerza de la huelga, este tipo de apoyo debería hacer que los huelguistas sean cautelosos de los políticos quienes buscan momentos de lucha como una oportunidad para canalizar la lucha de los obreros para el apoyo de EE.UU. imperialista.
Igual que sus colegas en la Universidad de Columbia y las enfermeras en huelga en Massachusetts, estos obreros de posgrado en huelga está demostrando que es crucial que los obreros se tomen las calles si quieren ganar incluso solo una pizca de migaja de los patrones. Su huelga entonces representa un paso en la lucha en contra de la explotación capitalista. Cambio significativo solo vendrá bajo el comunismo, sin embargo. Bajo el comunismo, los obreros ya no necesitaran luchar por necesidades básicas. Salarios y ganancias serán abolidas, junto con las fronteras que perpetúan desigualdad. El racismo y sexismo seguirán siendo características chupa sangres del antiguo orden capitalista. Este mundo comunista, liderado por el partido revolucionario PLP debería ser que guía todas nuestras luchas en contra de los patrones capitalistas.