Querido Desafío:
¡La revolución es mundial!
Un reciente viaje a Perú dio como resultado la distribución de más de 20 copias del Desafío y múltiples debates de amplio alcance sobre el estado del mundo, el capitalismo y la posibilidad de un futuro comunista. Encontré a muchos trabajadores aquí dispuestos a hablar sobre cómo el capitalismo les ha fallado, y trabajé para brindar una perspectiva más global a lo que aquí a menudo parece simplemente un mundo sin salida y sin esperanza.
Reavivar una vieja amistad ha dado lugar a la posibilidad de una nueva red de Desafío, y las conversaciones con familiares y vecinos sobre el genocidio en Gaza han abierto canales de comunicación sobre las causas de estas guerras, la corrupción, la explotación racista y cómo el comunismo podría realmente resolver estos problemas.
En honor a los primeros días de clases, tuve el honor de participar en una recaudación de fondos para una “ Carpa Escolar” en Gaza , organizada por un sexteto de jazz afroperuano. Un historiador palestino peruano dio una charla muy informativa sobre la historia de Palestina y la situación actual. Además de una audiencia en vivo, hubo más de 150 personas de todo el mundo que se conectaron virtualmente, y juntos recaudamos $5.000, lo que es suficiente para mantener esta escuela de carpa funcionando (incluyendo al menos una comida al día) durante un mes, lo que por supuesto demuestra nuestra monumental tarea por delante. Además de distribuir algunos periódicos en el evento, en la sesión de preguntas y respuestas pude llevar saludos internacionales y plantear cuestiones más agudas del imperialismo, el capitalismo y la lucha de clases (incluidas comparaciones con República Dominicana / Haití) y unir a las generaciones para aprender de la historia para cambiar todo este maldito sistema.
Aquí hay un conocimiento y un interés sorprendentes en las elecciones estadounidenses, que utilicé como punto de partida para demostrar que la verdadera palanca del cambio y la promesa existe fuera del sistema electoral, en la lucha de clases (internacional). ¡Esto es una bocanada de aire fresco para la mayoría de los trabajadores con los que hablé!
También participé —¡demasiado brevemente!— en una manifestación de condena al expresidente Alberto Fujimori, que murió al final de mi viaje. Los trabajadores se reunieron en la Plaza San Martín, en el centro de Lima, para denunciar su régimen racista y genocida, responsable de la muerte de decenas de miles de trabajadores y de una ola de asesinatos anticomunistas en la década de 1990. A pesar de su régimen asesino y de su largo encarcelamiento por crímenes contra la humanidad, su funeral fue celebrado como un gran acontecimiento por sectores de la clase dirigente. Incluso algunos trabajadores lamentan que “la economía era mejor” cuando él era presidente porque la vida aquí ha ido degenerando con el paso de los años (Perú tuvo la tasa de mortalidad por Covid per cápita más alta del mundo).
Al igual que Estados Unidos, Perú tiene su propia historia de comunismo y anticomunismo que debemos estudiar para entender cómo podemos construir nuestro movimiento internacional aquí, como en todo el mundo. Pero este viaje es otro recordatorio de que la revolución y la lucha por el comunismo son mundiales.
Una autocrítica: el próximo viaje, ¡traed más periódicos! (Se me acabaron).