Miembros del Partido Laboral Progresista (PLP) se unieron a más de 50 estudiantes y trabajadores en una intensa protesta del Primero de Mayo frente a la Embajada de Filipinas. La protesta, de tres horas de duración, comenzó con exigencias al embajador Romualdez para que protegiera a los filipinos detenidos por el ICE: “¡Haz tu trabajo o dimite!”. Después de 30 minutos, un empleado de la embajada salió a la puerta para recibir la carta con demandas específicas.
La manifestación cobró impulso a medida que más estudiantes y trabajadores se unieron a la manifestación del Primero de Mayo por todos los migrantes y por el poder obrero. Los organizadores hablaron del fascismo y la ley marcial en Filipinas. Celebraron la huelga de cuatro días de los fabricantes de chips Nexperia, que se habían enfrentado al régimen de Marcos este año, y exigieron un salario mínimo de 1200 pesos. Denunciando el Balikatan (los llamados juegos de guerra “hombro con hombro”), junto con la compra de cazas F-16 por parte de Filipinas, los oradores corearon “¡EE. UU. fuera de Filipinas!”. El último orador exigió el fin del imperialismo estadounidense y la guerra, terminando con el resonante cántico: “¡Trabajadores del mundo, uníos!”.
Miembros del PLP hablaron con un manifestante militante de la Universidad Americana sobre la lucha por el comunismo, trascendiendo la estrategia de liberación nacional. Compartimos invitaciones para el Primero de Mayo a nuestra cena y distribuimos periódicos del DESAFÍO a compañeros manifestantes y amigos de la organización estudiantil terpCHRP de la Universidad de Maryland. ¡La lucha de la clase obrera es global!