La ira y frustración de los trabajadores explotó en Ecuador, paralizando el país - de Quito a la capital a la costa pacífica. Estas protestas vienen después de que el Presidente Lenin Morena reveló planes de imponer medidas de austeridad que amenaza a hundir a los trabajadores más hacia al abismo de la pobreza y la explotación capitalista. Las enormes escenas a través de Ecuador muestra lo que los patrones temen más: los trabajadores, cuando están organizados y enfurecidos, tienen el poder de detener de golpe el sistema capitalista. Sin embargo, ausente de la política y liderazgo comunista, por lo que el Partido Laboral Progresista (PLP) esfuerza traer a estos y todas las luchas alrededor del mundo, los trabajadores quedarán atrapados en una puerta giratoria de reformas con punto muerto que traen más crises económicos y estafas de los políticos liberales.
Los trabajadores frenan los negocios como de costumbre
La medida impopular, el préstamo de $4.2 mil millones del Fondo Monetario Internacional, que muchos refieren como “el Paquetazo”, incluye exigir el fin a los subsidios combustibles. Los precios de gas ya han aumentado de US $1.85 a US $2.39 a los precios de diésel a un aumento de 123%. Las medidas también aportarían ataques adicionales sobre los trabajadores desde perdiendo un día de trabajo sin paga para todos los trabajadores públicos e aumentos sorprendentes a precios por las necesidades básicas como la comida y ropa (Reuters 10/4.)
El acuerdo llevó a protestas comenzando con huelgas de los trabajadores de transporte. Las protestas se extendieron como fuego a través del país, movilizando a miles de grupos indígenas y estudiantes, llevando el negocio como de costumbre a un paro.
Los trabajadores se enfrentaron violentamente a la policía, incendiaron llantas y propiedad estatal, organizaron la paralización de trabajo y suspendieron las escuelas y servicios municipales. Los trabajadores están exigiendo la reanudación de los subsidios y la destitución del gobierno Moreno. La policía, cuya función es proteger a los patrones y su sistema, respondieron atacando a los manifestantes, resultando en 477 arrestos y una muerte (Telesur, 10/6.)
Divisiones dentro la clase gobernante de Ecuador
Estos acontecimientos reflejan las divisiones dentro la clase gobernante de Ecuador. Cuando Rafael Correa, el presidente anterior llegó al poder, él pudo pacificar a los trabajadores con unas limitadas reformas financiado por los ingresos del petróleo. Así como la situación en Venezuela, cuando los precios de petróleo se desplomaron en 2008, las ilusiones que los falsos izquierdistas como Correa y Chávez habían construido como un paraíso para los trabajadores se derrumbaron – con la ayuda de la política exterior estadounidense quien solicitó eliminar los subsidios. A diferencia de Maduro, quien siguió a Chávez y avanzó a empatar la economía de Venezuela más cerca a los imperialistas chinos, la respuesta de Moreno a esta crisis ha sido de moverse más cerca a los Estados Unidos. Este mayo pasado, él firmó la Alianza del Pacifico y el que Correa rehusó de ingresar, uniéndose con otros fieles aliados EE.UU. como Colombia, Perú, y México (Reuters 5/19.) Mientras Maduro y Correa están exigiendo la destitución de Moreno.
Finalmente, la clase gobernante de Ecuador es uno de muchos peones en la arena global de rivalidad inter-imperialista entre los Estados Unidos y China, cada una de las cuales buscó comprar la lealtad de distintos sectores de la clase gobernante ecuatoriano y otras clases gobernantes en toda América Latina a través de inversiones.
Entre 2005 y 2013, China representó 57% de toda la inversión extranjera en Ecuador (NYT, 7/15.) Como hemos visto en el vecino Venezuela y otros países alrededor del mundo, escogiendo lados en una batalla entre rivales capitalistas, sean pequeños patrones locales o poderes imperialistas, es un error mortal para los trabajadores. Ni Moreno o Correa, Maduro o Guaidó (el títere EE.UU. en Venezuela) representan una solución real y duradero para los trabajadores.
Rechazar el nacionalismo ecuatoriano, convierta la reforma a una revolución
Nosotros en el PLP aplaudimos a estos trabajadores quienes valientemente están desafiando la explotación y opresión que el capitalismo ha forjado ante ellos. Su militancia y deseo de salir en lucha contra la policía y ejército es una inspiración para los trabajadores en todas partes. Aun, estas batallas son para reformas – para regresar el país a un estilo Correa-democracia social. Pero tenemos que realizar estas bases inestables en que estas reformas están construidas. Cuando la economía se derrumba, como siempre resulta bajo el capitalismo, las reformas desaparecen. Lo hemos visto una y otra vez.
El PLP trata de tomar el espíritu luchador valientemente exhibido en Ecuador, entre los trabajadores automotrices en los Estados Unidos, la juventud contra el cambio climático global, y más – y combinarlo con la política y liderazgo comunista. ! Este es la clave para la liberación de los trabajadores del mundo. Unámonos!