Este artículo es un discurso pronunciado en un debate en una escuela virtual de cuadros por un camarada de Colombia con la participación de camaradas de México.

El racismo históricamente se desarrolló a partir del colonialismo y la aparición y desarrollo del capitalismo. En Europa este “desarrollo” que permitió la “acumulación primitiva del capital” se basó en la explotación de la mano de obra esclava de africanos, asiáticos, indígenas y otros “pueblos de color” justificando este método con la teoría de razas superiores e inferiores. En norte América surgió en la forma de una fuerza de trabajo multirracial con prebendas para los blancos y genocidio para los indígenas. Así surgió el racismo anti negro, que hoy divide a los trabajadores en el mundo entero y es base de superganancias capitalistas y el atraso absoluto de las comunidades negras.

Los europeos llevaron indígenas de América para exhibirlos como “animales” en cautiverio, reforzando el ideal de raza inferior para justificar el genocidio en América. Ya en la era industrial los capitalistas utilizaron niños en las fábricas, demostrando el carácter clasista e inmisericorde que rige actualmente en todas las áreas del planeta donde los trabajadores y oprimidos componen un gran porcentaje de soldados en las fuerzas armadas patronales, a las cuales ellos se ven forzados a enlistarse debido a la falta de oportunidades de empleos. Por tal razón, estos obreros son la clave al éxito de la revolución en todos los países donde el racismo yace como fuente de poder y ganancias para los patrones. Es también su talón de Aquiles, pues cada obrero superexplotado es un líder revolucionario potencial para la clase obrera. Cada joven desempleado y maltratado por la brutalidad policial es un recluta potencial para la guerra civil por el poder obrero. Esta es la labor educativa que debemos desarrollar a diario los militantes del PLP junto a nuestros lectores, amigos y familiares en la construcción de base.

El racismo, junto al sexismo y nacionalismo, es utilizado para dividir a nuestra clase creando ejércitos como carne de cañón para sus genocidios imperialistas y empobreciendo a las obreras y trabajadores de los países con bajo nivel de desarrollo económico, como Ecuador, Perú, Haití, Bolivia, Colombia, África etc. donde el 90% de sus habitantes son afros e indígenas y el 85% se encuentra en estado de pobreza, y el 42% en miseria absoluta. Históricamente estos trabajadores han dirigido cientos de militantes luchas de clases tales como huelgas, tomas, acciones laborales, y decenas de rebeliones, asonadas, paros y estallidos sociales. Los capitalistas utilizan la fuerza y el engaño para pacificar a los trabajadores, ya sea mintiendo sobre la guerra contra la pobreza, con míseros subsidios o pésimos trabajos de celador, mensajeros, constructores, minería artesanal, etc. Los capitalistas y medios de información hacen creer a los trabajadores que pueden ganar más influencia eligiendo a políticos mafiosos, policías corruptos o alcaldes negros.

Hoy el capitalismo destina muy pocos recursos y muchas mentiras para apaciguar la ira de los trabajadores con mínimas reformas. Como las que se debaten actualmente en el parlamento colombiano, mientras el desempleo para las mujeres negras ha aumentado el doble de la tasa de desocupación de los blancos, mientras todos los sueldos han disminuido.

En Colombia y en el mundo los trabajadores negros son la clave para la lucha de clases, pero si no estamos con ellos para ganarlos al comunismo, su ira se convertirá en fascismo/liberalismo o serán conducidos mansamente a las urnas electorales. Tenemos que levantar la conciencia comunista en fábricas, universidades, comunidades y cuarteles. No podemos ganar a los trabajadores más avanzados sin estar envueltos en sus luchas. Si no combatimos el racismo la clase trabajadora lucha con las manos atadas a la espalda, la lucha revolucionaria necesita una clase obrera unida, por esto los comunistas vemos la unidad antirracista como clave para la lucha contra los patrones quienes son los creadores y se benefician de la esclavitud salarial. Esta debe de ser una lucha masiva y violenta ya que la segregación es un ataque violento contra toda la clase trabajadora. Negros, latinos, mestizos, asiáticos e indígenas debemos unirnos masivamente para atacar al racismo como enemigo de todo el proletariado, ya que tenemos las mismas cadenas de esclavitud y muchos sufrimientos por la opresión capitalista. Debemos unirnos como clase revolucionaria bajo la línea política del PLP para destruir el actual sistema guerrerista, mafioso y fascista.

Querido Desafío:

¡La revolución es mundial!

Un reciente viaje a Perú dio como resultado la distribución de más de 20 copias del Desafío y múltiples debates de amplio alcance sobre el estado del mundo, el capitalismo y la posibilidad de un futuro comunista. Encontré a muchos trabajadores aquí dispuestos a hablar sobre cómo el capitalismo les ha fallado, y trabajé para brindar una perspectiva más global a lo que aquí a menudo parece simplemente un mundo sin salida y sin esperanza.

Reavivar una vieja amistad ha dado lugar a la posibilidad de una nueva red de Desafío, y las conversaciones con familiares y vecinos sobre el genocidio en Gaza han abierto canales de comunicación sobre las causas de estas guerras, la corrupción, la explotación racista y cómo el comunismo podría realmente resolver estos problemas.

En honor a los primeros días de clases, tuve el honor de participar en una recaudación de fondos para una “ Carpa Escolar” en Gaza , organizada por un sexteto de jazz afroperuano. Un historiador palestino peruano dio una charla muy informativa sobre la historia de Palestina y la situación actual. Además de una audiencia en vivo, hubo más de 150 personas de todo el mundo que se conectaron virtualmente, y juntos recaudamos $5.000, lo que es suficiente para mantener esta escuela de carpa funcionando (incluyendo al menos una comida al día) durante un mes, lo que por supuesto demuestra nuestra monumental tarea por delante. Además de distribuir algunos periódicos en el evento, en la sesión de preguntas y respuestas pude llevar saludos internacionales y plantear cuestiones más agudas del imperialismo, el capitalismo y la lucha de clases (incluidas comparaciones con República Dominicana / Haití) y unir a las generaciones para aprender de la historia para cambiar todo este maldito sistema.

Aquí hay un conocimiento y un interés sorprendentes en las elecciones estadounidenses, que utilicé como punto de partida para demostrar que la verdadera palanca del cambio y la promesa existe fuera del sistema electoral, en la lucha de clases (internacional). ¡Esto es una bocanada de aire fresco para la mayoría de los trabajadores con los que hablé!

También participé —¡demasiado brevemente!— en una manifestación de condena al expresidente Alberto Fujimori, que murió al final de mi viaje. Los trabajadores se reunieron en la Plaza San Martín, en el centro de Lima, para denunciar su régimen racista y genocida, responsable de la muerte de decenas de miles de trabajadores y de una ola de asesinatos anticomunistas en la década de 1990. A pesar de su régimen asesino y de su largo encarcelamiento por crímenes contra la humanidad, su funeral fue celebrado como un gran acontecimiento por sectores de la clase dirigente. Incluso algunos trabajadores lamentan que “la economía era mejor” cuando él era presidente porque la vida aquí ha ido degenerando con el paso de los años (Perú tuvo la tasa de mortalidad por Covid per cápita más alta del mundo).

Al igual que Estados Unidos, Perú tiene su propia historia de comunismo y anticomunismo que debemos estudiar para entender cómo podemos construir nuestro movimiento internacional aquí, como en todo el mundo. Pero este viaje es otro recordatorio de que la revolución y la lucha por el comunismo son mundiales.

Una autocrítica: el próximo viaje, ¡traed más periódicos! (Se me acabaron).

El siguiente artículo se puede utilizar en clases de historia y de humanidades. Este modelo de unidad multirracial es una buena base para establecer el tono del año escolar.

El próximo 17 de octubre se conmemora el 165 aniversario del asalto en Harper’s Ferry. ¡Fue una acción revolucionaria que muestra la necesidad de la lucha militante, multirracial, antirracista y revolucionaria!

La clase esclavista del sur le tenían pavor a la unidad multirracial y militante de los militantes de Harper’s Ferry, una verdadera reprimenda de su estereotipo. Uno de los 5 militantes negros, Osborne Anderson, describió la atmosfera antes de la redada:

“Se me ha permitido realizarme al máximo, la harmonía moral, mental física y social de una familia anti esclavista. Luchando para llevar a cabo el los principios de la causa anti esclavista. En casa de John Brown, y en su presencia, hombres de diferentes partes del continente se reúnen y unen en una sola compañía, en donde el prejuicio no se atreve a mostrar su horrible cara – ningún fantasma de distinción encuentra espacio para entrar”.

Desde Niñez, Brown Juró Combatir Esclavitud

Esta confianza entre negros y blancos no ocurrió de un día para otro. El padre de John Brown era un líder del Tren Clandestino en Ohio. A los 12 años, Brown conoció a un joven fugitivo esclavizado y se dio cuenta del sufrimiento que padeció bajo la esclavitud, esto influencio a Brown para toda la vida. El creía que negros y blancos son completamente iguales, y a diario ponía en práctica este conocimiento.
De adulto, Brown se mudo con su familia a una granja en North Elba, N.Y. cerca de una comunidad de antiguos negros esclavizados. Estas hermanas y hermanos negras con regularidad las invitaba a su casa a cenar con su familia. Les llamaba, Sr. y Sra., un gran contraste de las costumbres racistas de la era. (Aun entre los muchos que se oponían a la esclavitud).

En preparación del ataque, Brown se unió a abolicionistas negros y blancos. En abril de 1858, mientras colectaba fondos, armas y voluntarios en Canadá, visito a Harriet Tubman. Ella era muy conocida en la comunidad de esclavos fugitivos negros, también había guiado a muchos a la libertad. Tubman apoyo sus planes, pidiéndole que la redada fuera el 4 de Julio de 1858, con la promesa de traer más voluntarios. Acordaron comunicarse a través de un amigo en común, Frederick Douglass, abolicionista negro que había sido esclavizado.

Tubman Personalmente Liberó 300 obreros esclavizados

Las experiencias de Tubman los hicieron aliados. Ella nació alrededor de 1820 de padres esclavos en una plantación en Maryland, trabajo en la casa y el campo, sufrió el abuso físico y con lágrimas en los ojos vio que sus nueve hermanos eran vendidos a otras familias. Cuando era adolescente, sufrió una fractura en el cráneo debido a la brutalidad de la vida en la plantación. Su “amo” trato de venderla como “dañada”. Pero ella escapo. Camino por varias semanas, casi siempre por las noches, 90 millas a través del Tren Clandestino hasta llegar a Filadelfia. Poco después regresó y guio a su familia hacia la libertad a Canadá. Eso solo fue el comienzo.

Por 11 años, con recompensa para su captura, Tubman hizo aproximadamente 13 viajes hacia el sur y guio a más de 300 obreros esclavizados a Canadá. Esta audaz y resuelta revolucionaria dijo, “nunca descarrile mi tren y nunca perdí un pasajero”. Tubman endosó la lucha armada de Brown en Kansas contra las pandillas esclavistas. Brown, sabía del valor y militancia de Tubman y su conocimiento del terreno del Tren Clandestino, y sabía que sería invaluable su participación en sus planes para liberar a los esclavos a cualquier costo. Brown siempre la llamo “General Tubman”. Ambos creían en la acción directa y la violencia armada para acabar con la esclavitud.

Tubman se enfermó y no pudo llevar sus fuerzas a Harper’s Ferry, pero su trabajo inspiro al resto de los militantes. El ejemplo de Tubman, Osborne Anderson y los otros militantes negros, desacreditó la imagen creada por los esclavistas sureños de que los negros son victimas atemorizadas y pasivas, e inspiró al movimiento abolicionista.

Rebeldes Negros Petrificaron Esclavistas

Para aquellos que hoy dicen que los trabajadores no lucharán contra la opresión, los tenaces hechos de la historia demuestran que la lucha es universal. Los esclavistas lo sabían, aun cuando hablaban de los “dóciles negros” . Ellos estaban petrificados de los rebeldes negros y de los “agitadores foráneos”. Patrullaban toda la noche, con perros y armas para intimidar a sus trabajadores esclavos y mantenerlos alejados de los yanquis y la literatura abolicionista.

Hoy los “agitadores foráneos” son los comunistas del PLP, luchando para abolir el capitalismo racista. Los patrones aseguran que la empobrecida clase trabajadora esta muy subyugada y alienada para luchar colectivamente, dicen que los trabajadores odian el comunismo. Aun así, organizan a policías, seguridad en fábricas, milicias racistas, a negros nacionalistas y líderes sindicales vendidos tratando de mantener alejados a comunistas. Los despiden en cuanto los descubren en las fábricas.

¿Por qué tienen tanto miedo si supuestamente la clase trabajadora es tan pasiva?

Hoy, uniéndonos para luchar contra el enemigo de clase mutuo es una de las principales formas en que la gente de diferente procedencia puede sobreponerse a la segregación “natural” que promueve la sociedad capitalista.

Brown y Tubman demostraron que las ideas racistas y nacionalistas no se pueden simplemente sacar de la cabeza. Se necesita un cambio material en la forma de vivir.

Entre los negros y los militantes abolicionistas blancos se desarrollo la unidad multirracial trabajando juntos por años, conociéndose mientras luchaban para superar sus diferencias.

Hoy, el capitalismo estadounidense ha creado sus contradicciones. Los trabajadores aun viven separados en sus barrios según la “raza”, pero se juntan en escuelas y lugares de trabajo. Ahí, los patrones tratan de dividirnos, con clasificaciones laborales racistas y diferentes tipos de cultura burguesa (ejemplo: música “hip hop” contra música “country”). Sin embargo, los trabajadores se codean todos los días. Los trabajadores con conciencia de clases en el PLP debemos desarrollar amistad y lasos irrompibles en la lucha.

Lucha de clases supera al racismo

La lucha militante antirracista contra los kkkops, que robaron las vidas de George Floyd, Breonna Taylor y Jacob Blake, y muchos otros, son destellos del potencial revolucionario de la clase trabajadora.

Como en el tiempo de Tubman y Brown, el racismo impregna la sociedad. Pero las rebeliones y huelgas nos muestran la unidad multirracial y la lucha contra los patrones. En la fábrica Smithfield Ham en Tarheel, NC, por ejemplo, durante 15 años que duró la lucha por la sindicalización, los patrones trataron de intimidar a los trabajadores para que no firmaran las tarjetas del sindicato.

Pero cuando se organizó el apoyo de los trabajadores de tiendas de otros lugares, hizo que los trabajadores de Smithfield se sintieran parte de una comunidad más grande. Cuando los patrones trajeron a los agentes de inmigración, tratando de intimidar a los trabajadores latinos, todos los trabajadores se dieron cuenta que era un truco para dividirlos y ¡500 marcharon en protesta a las redadas! Después votaron a favor del sindicato.

En 2008, los trabajadores de Stella D’Oro se fueron a la huelga por 11 meses. Estos trabajadores inmigrantes de todo el mundo, hombres y mujeres, se sobrepusieron a las diferencias y lucharon juntos. ¡Ningún trabajador cruzo la línea de huelga! El PLP organizó a amigos, camaradas, maestros y estudiantes para que caminaran junto a los huelguistas, llevando solidaridad y liderato comunista. Los miembros del PLP, muchos de ellos maestros sindicalizados, mantienen su solidaridad con los huelguistas a través de donaciones, plantones, marchas y apoyando en la lucha contra el cierre de la planta. El asalto de John Brown y el valor de Harriet

Tubman de liberar a 300 esclavos en el Tren Clandestino nos dejó muchas lecciones

La militancia era lo más importante. Tubman dijo que ella nunca hubiera podido volver a ser esclava, que prefería morir. Brown, después de la lucha en Kansas, se dio cuenta que solo con sangre podría acabar con la esclavitud.

Muchos trabajadores estuvieron de acuerdo con ellos, especialmente después de 1857 y la ley Dred Scott que legalizó a la esclavitud en todo el país.

La unidad multirracial es esencial en cualquier lucha. Trabajadores negros que escapaban de la esclavitud recibieron la ayuda de abolicionistas blancos para llegar al Norte.

Miles de trabajadores, negros y blancos, ayudaron a esclavos en su viaje hacia la libertad y los defendieron de los ataques de los “atrapa esclavos”. Estos trabajadores participaron en reuniones públicas, donaron dinero, hablaron con sus amigos y ayudaron y albergaron esclavos fugitivos.

Hoy, el PLP hace cosas similares. Hablamos con nuestros amigos sobre las luchas políticas y la necesidad vital de la unidad multirracial contra el sistema racista. Instamos a que se unan a las manifestaciones militantes y antirracistas, construimos una base multirracial con nuestros compañeros de trabajo, donamos al DESAFÍO.

Cada vez que alguien que conocemos hace cualquiera de estos actos, esta adquiriendo un compromiso político en la lucha contra el racismo, capitalismo e imperialismo, así como miles de anti esclavistas apoyaron la lucha contra la esclavitud. Tomando cada pequeño paso para servir y defender a quienes habían escapado la esclavitud y a quienes luchaban directamente contra ella.

Únete al PLP

Invitamos a todos trabajadores, estudiantes, y soldados que toman parte en estas luchas que se unan al PLP. Hoy los partidarios de la lucha antirracista entienden – como lo hicieran los miles que apoyaron a Brown y Tubman hace 161 años – que los revolucionarios como los militantes de entonces y el PLP ahora son los líderes honestos y confiables en la lucha. Cuando la acción directa es necesaria, ellos saben en quien confiar. El DESAFÍO reporta constantemente como los trabajadores son ganados a la militancia y la unidad multirracial contra el patrón racista, avanzando aquellos que se unen a nuestras filas. Paso a paso, el movimiento comunista crecerá y dará liderato a la clase trabajadora hacia la revolución y un nuevo mundo basado en los miembros de nuestra clase, satisfaciendo las necesidades mutuas, sin patrones racistas ni su sistema de ganancias.

Unirse al PLP fue como abrir un tercer ojo

Este fue mi primer proyecto de verano desde que me uní al Partido Laboral Progresista y fue una experiencia que me cambió la vida, por decir lo menos. Todavía recuerdo cómo me sentí cuando llegué a mi primer proyecto de verano hace tres años y me fui sintiéndome inspirada para involucrarme más. Aun así, experimenté lo que se sintió como un colapso mental cuando comencé a comprender cuán complejo e inmenso es el capitalismo. Recuerdo que me pregunté “¿Cómo es posible que todo lo que he sabido durante toda mi vida fuera una mentira?” No existía el sueño americano y crecí en la pobreza con padres inmigrantes, fue algo que me di cuenta desde una edad temprana pero no pude comprender por completo.

Sabía que la forma en que vivía no era justa, pero en ese entonces sentía que así era la vida y que no podía hacer nada al respecto, no me había dado cuenta de que mi familia y todos los que me rodeaban vivían de esta manera debido al capitalismo. No había hecho esa conexión y no pude encontrar las palabras para describir lo que estaba sintiendo hasta que me expusieron al PLP y al comunismo. Este proyecto del verano pasado me permitió comprender mejor la conciencia de la clase obrera internacional y mucho más. Cada encuentro que tuve con los trabajadores me dejó en shock al darme cuenta de lo conscientes que están los trabajadores de este gobierno explotador. Desde las enfermeras que hicieron huelga en el Hospital de la Universidad de Illinois para conseguir contratos justos, los estudiantes que vinieron a marchar en la Convención Nacional Demócrata en solidaridad con las vidas palestinas, hasta los trabajadores del transporte público en el tren de Chicago. Casi todos los trabajadores de Chicago compartían el mismo sentimiento y comprendían que nunca podríamos sobrevivir bajo el capitalismo a menos que estuviera gobernado por la clase obrera.

En los últimos años, ha sido como si se me encendiera una bombilla en la cabeza, uno por uno, cada camarada que me ha enseñado más sobre el comunismo y la lucha por la clase obrera internacional. Aunque todavía me cuesta sentir que no puedo comprender plenamente las ideas del comunismo, me siento reconfortado por otros camaradas que comparten esos sentimientos conmigo. Sé por qué han estado luchando y por qué siguen luchando los camaradas del Partido. Mi mejor consejo para quienes se sienten impotentes y no están seguros de cómo luchar contra el capitalismo es que se unan al Partido Laboral Progresista. No están solos en la lucha por un futuro mejor para la clase trabajadora.
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Una chispa de esperanza en una fiesta de amor entre sindicalistas y políticos

NYC 9/7/24 Decenas de miles de trabajadores marcharon hoy en el desfile del Día del Trabajo organizado por el Consejo Central del Trabajo de la Ciudad de Nueva York. Si pensabas que se trataba de una muestra masiva de solidaridad y fuerza sindical en la lucha contra los males del sistema capitalista, te equivocarías lamentablemente. Sin embargo, en medio de la fiesta anual del amor entre la burocracia laboral y los piratas del Partido Demócrata de Nueva York, hubo chispas de esperanza.

Los miembros del Partido Laboral Progresista (PLPistas) participaron con grupos de trabajadores que exigían que sus sindicatos lucharan contra el genocidio en Gaza y con jubilados que luchaban contra la unión de los jefes de la ciudad y los líderes del Comité Municipal del Trabajo para convertir a 250.000 trabajadores jubilados de la ciudad de su actual cobertura médica tradicional y de la cobertura suplementaria pagada por la ciudad en un plan de salud inferior de Medicare (dis)Advantage.

Los PLPistas traemos nuestro mensaje de que el sistema capitalista es la causa de todos los problemas que enfrentan los trabajadores desde Palestina hasta la ciudad de Nueva York. Decimos que las soluciones provisionales al cáncer del capitalismo no son la solución. Sabemos que sólo la revolución comunista pondrá fin a la miseria que enfrentan los trabajadores en todo el mundo. Para ganar a trabajadores como los que marcharon hoy, tenemos que sumergirnos en cada lucha que enfrentan los trabajadores y participar con ellos en organizaciones controladas por nuestros enemigos de la clase dominante.
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Bebamos vino, cenemos y nos unimos al PLP

El fin de semana pasado participé en una cata de vinos para recaudar fondos para cubrir los gastos del proyecto de verano de este año del Partido Laborista Progresista (PLP). Se organizó en casa de unos camaradas, donde abundaban la comida deliciosa y habian muchos postres y platos para untar. El acto estuvo muy concurrido y jugamos a un divertido juego en el que se nos dio una lista de vinos que estaban escondidos en sacos de arpillera y teníamos que adivinar qué botella era cuál basándonos en la descripción que figuraba en la lista de vinos. Hice un breve informe y un discurso instando a la gente a hacer donaciones. Empecé resumiendo los éxitos de los proyectos de verano y la repercusión del Partido en las convenciones nacionales demócrata y republicana. Contrasté su convención con lo que el PLP logró y lo que la clase trabajadora puede lograr - frente al circo total que fue la convención y el desastroso liderazgo del gobernante - que todos presenciamos en el debate entre Kamala Harris y Donald Trump. Esto es lo que dije.

Ni los demócratas ni los republicanos se preocupan por la clase trabajadora. Ambos tenían policías asquerosos en sus convenciones para mantener fuera a la clase trabajadora enfadada. Los únicos que lucharán por nosotros somos nosotros, la clase trabajadora. Nosotros somos los que nos salvaremos.

A principios de esta semana fue el debate presidencial. Si viste el debate esa noche, definitivamente escuchaste todas las cosas racistas y sexistas que salieron de la boca de Trump. Al parecer, la comunidad haitiana de Springfield, Ohio, está comiendo perros y gatos. ¿Oíste también que las mujeres «abortarán» a sus hijos después de nacer si se reinstaura Roe V. Wade?

Durante el debate, también llamó a Kamala comunista y marxista, lo que es una gran broma, y ha dicho que odiaba a Israel. Trump la ha hecho parecer mejor de lo que realmente es, y sabemos que es una amenaza aún mayor para la clase trabajadora. Sí, los republicanos MAGA son como nazis racistas, pero no son tan peligrosos como Harris y los jefes liberales, por eso también queremos protestar contra la Convención Nacional Demócrata en Chicago. Todo lo que está sucediendo a los migrantes y trabajadores en este país y el genocidio en Gaza empeoró bajo Biden y Harris.

Por esta razón, no debemos votar en estas elecciones sino organizarnos para la revolución. Un camarada también habló sobre el 11-S que nunca termina para los trabajadores de todo el mundo y cómo Harris recibió el apoyo de Dick Cheney, uno de los principales criminales de guerra cómplice de la muerte de millones de trabajadores en Afganistán e Irak.

Muchos camaradas también intervinieron y hablaron sobre los ataques de los liberales a los estudiantes y expusieron por qué la clase obrera ganará la revolución. Al final, nuestros amigos que vinieron donaron y uno incluso se unió al Partido, otro clavo en el ataúd de los patrones.
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El DNC, asquerosamente rico y lleno de mentiras

Estimado DESAFÍO,

Pasé horas viendo la Convención Demócrata y estoy convencido de que los políticos liberales son el mayor mal. Mienten constantemente y de manera convincente, especialmente si no conocemos los hechos. A continuación, se ofrecen algunos ejemplos:

• El exdirector de la CIA, Leon Panetta, y otros funcionarios militares elogiaron el papel de Estados Unidos en Afganistán e Irak, sin decir nunca cómo las guerras destruyeron los países, mataron a millones y dejaron a los soldados estadounidenses con trastorno de estrés postraumático y heridas devastadoras.
• El presidente de la UAW, Shawn Fain, elogió a Biden como amigo de los trabajadores porque pasó dos minutos en la línea de piquetes de la UAW. Además, después de que el sindicato aprobara una resolución para un alto el fuego, Fain apoyó a Biden. La Administración ahora está amenazando al sindicato por su voto a favor de Gaza.
• Kamala lloró lágrimas de cocodrilo al describir las condiciones en Gaza mientras pedía apoyo a Israel para defenderse y se negaba a detener la ayuda estadounidense a Israel.
• Los oradores elogiaron el trabajo de Kamala como fiscal sin mencionar que quería multar a los padres cuyos hijos tenían muchas ausencias escolares. Kamala presentó la política migratoria como humana cuando Biden y Obama deportaron a más personas, incluidos haitianos, que Trump.
• Los oradores elogiaron repetidamente a Kamala como “amable”, una gran amiga y madre, que construyó un culto a la personalidad.
• Los oradores y delegados representaron muchos grupos demográficos, incluidas categorías “raciales”, discapacidades, generaciones, géneros, orientaciones sexuales y religiones. Una imagen fuerte.
• Los oradores prometieron elevar a la clase media, sin mencionar a la clase trabajadora y a los pobres.
• Hubo algunas referencias a la COVID y a los programas de Biden que proporcionaron un programa de estímulo y pruebas, vacunas, mascarillas y medicamentos gratuitos. No se mencionó que estas protecciones no son gratuitas ahora; ¡dos pruebas a menudo cuestan $ 20 y el medicamento Paxlovid cuesta $ 140!

La Convención reflejó las cualidades de un espectáculo musical de Broadway. Moda, maquillaje, cabello, discursos, gestos, energía, ritmo, todo coreografiado y guionado profesionalmente hasta el último detalle. ¿Un aspecto positivo? John Legend y Stevie Wonder vendiéndose por los demócratas. Lamentablemente, la multitud de 20.000 personas respondió con cánticos de “USA, USA” y carteles patrióticos. Las cámaras nunca captaron ningún signo de disenso por parte de los delegados no comprometidos ni de los miles que protestaron contra el genocidio en las calles de Chicago. Fue un festival de amor por el capitalismo estadounidense y sus patrocinadores corporativos que nos están preparando para más guerras y austeridad económica. ¿Reminiscencias de Alemania en los años 30?
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