Challenge Radio(Podcast!)  PLP @plpchallenge @plpchallenge

Seleccione su idioma

  • English
  • Français
Join the Revolutionary Communist Progressive Labor Party
Partido Laboral Progresista
  • Página Inicial
  • Nuestra Lucha
  • Desafio
  • Documentos Clave
  • Literatura
    • Libros
    • Folletos y Prospectos
  • Revistas
    • PL Revistas
    • Archivos Desafío
  • Únete a Nosotros
  • Buscar
  • Donar
  1. Está aquí:  
  2. Página Inicial
Information
Imprimir

La Unión Soviética aplasto el fascismo. Mentiras capitalistas sobre la Segunda Guerra Mundial

Information
09 Marzo 2018 454 visitas

Esto es parte de una extensa serie de artículos sobre la Revolución Bolchevique, sus triunfos y sus derrotas, del movimiento comunista mundial del siglo XX. Sus comentarios y críticas son bien recibidos.

La clase trabajadora internacional, dirigida por la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (USSR), derrotó el fascismo en la II Guerra Mundial, un gran logro. Los gobernantes capitalistas mienten acerca la II Guerra Mundial, escondiendo el papel clave de los trabajadores y el liderato comunista en esa victoria. ¡Nosotros rechazamos esas mentiras!
Mentira Numero 1: Los capitalistas Británicos, Franceses y Estados Unidos (”Aliados”) siempre se Opusieron a Hitler
Actualmente, lo apoyaron y ayudaron a Hitler hasta el último momento.
Comenzando con el gobierno de Hitler en 1933, los líderes de Los Estados Unidos y Britania ignoraron los asesinos Nazis de los judíos.
Britania, Francia y los Estados Unidos apaciguaron a Hitler, esperando que él atacara a la Unión Soviética. Dejaron que Hitler se re-armara. Le dieron Checoslovaquia en 1938. Condujeron dinero del extranjero a Alemania en la Bolsa de Londres. Justo antes de la guerra en septiembre 1939, Alemania compró doble de su requisito mensual de caucho de la Bolsa del Caucho de Londres.
Hasta después de que comenzara la guerra, Alemania consiguió petróleo a través de Italia y el algodón americano a través de la Suiza.
De 1935-1939, Francia y Britania rechazaron cinco propuestas Sovieticas para aliarse contra Hitler. Por fin, los soviéticos hicieron un pacto con los Nazis, esperando de ganar tiempo en preparación de un ataque Nazi.
En testimonio posguerra, el General Nazi Jodl dijo, “el ejército alemán… (ganó) la campaña Polaca [septiembre, 1939] porque 110 divisiones francesas y británicos enfrentando a 29 divisiones alemanes…hicieron nada.” El mando superior francés pro-nazi se rindió. Cuando los alemanes se acercaron a Paris, 20 divisiones francesas permanecieron en Siria, solamente para amenazar a Asia Central Soviética. Soldados franceses tratando de enterrar sus armas para la resistencia fueron ordenados a que los entregaran a los nazis.
Los gobernantes británicos, franceses y americanos apoyaron al fascismo. Durante la Guerra Civil Española (1936-39), Británia, Francia y los Estados Unidos ayudaron al fascista General Franco en bloqueando suministros para el gobierno español anti-fascista; Franco recibió petróleo de Texaco, 12,000 automóviles de Ford y GM, y apoyo militar de Alemania e Italia. Mientras los capitalistas daban España a los fascistas, la clase trabajadora reclutó voluntarios a las Brigadas Internacionales para luchar contra Franco. Comunistas e izquierdistas de 53 países se unieron a estas brigadas. Muchos murieron para la causa.
Después de que guerra fuera declarada, los Estados Unidos/Británia prestaron dinero a España e Italia - aliados de Hitler.
Si los nazis solamente hubieran aterrorizado a los trabajadores y atacaban a la USSR, los capitalistas Británicos-Franceses-Estados Unidos los hubieran dejado solos. Estos capitalistas, antes, durante y después de la Segunda Guerra Mundial, apoyaron a docenas de fascistas y asesinos de masas, de Chile a Indonesia. Pero Hitler tomó Polonia, Holanda, Bélgica y Francia. Entonces los Aliados capitalistas tuvieron que pelear contra Hitler – pero no porque estaban opuestos al fascismo. Británia lucho por su imperio colonial. Los Estados Unidos pelearon por control del pacifico y para ser sé el más grande poder capitalista.
Mentira Número 2: Los Estados
Unidos y Británia derrotaron a Hitler, con una ayuda mínima de la USSR
Actualmente, fue el Ejército Rojo Soviético y los partidarios dirigidos por los comunistas de Francia, Italia, Grecia, Yugoslavia, China, Corea, Vietnam y las Filipinas quienes derrotaron el Eje Fascista Alemán-Italiano-Japonés.
Hitler atacó a la USSR el 22 de junio, 1941 con 270 divisiones—3,600,000 soldados. (Hitler tomó a Francia con solamente 50 divisiones.) Los nazis invadieron una tercera parte de tierra soviética. Pero el Ejército Rojo luchó heroicamente hasta la victoria.
En 1941, los nazis rodearon Leningrado. Hitler ordenó a que destruyeran completamente el lugar de nacimiento del Bolchevismo. La población de Leningrado sufrió de extremo hambre bajo estado sitiado de 900 días, pero bajo el liderato comunista, nunca se rindieron.
Ya para octubre 1941, los nazis avanzaron a Moscú; pudieron ver el Kremlin. Cuando el liderato soviético decidió quedarse en la ciudad, la población entera se levantó en defensa. La población civil se unió a militares de defensa. Mujeres, hombres, jóvenes y grandes de edad, excavaron acequias anti-tanques en clima helado. Después de agotar a los fascistas, los soviéticos contra atacaron, empujando para atrás al enemigo 100 miles – el primer derrota para los nazis.
En Stalingrado, superados en número y menos armados, los soviéticos lucharon de casa a casa. Los trabajadores defendieron su sociedad comunista, voluntariamente quedándose en sus fábricas construyendo tanques mientras caían las bombas. Si alguna vez se quiso un ejemplo del espíritu comunista, éste es Stalingrado. ¡La valentía de los defensores, la determinación y la camaradería representa lo mejor de la humanidad! Stalingrado también demuestra la planificación y estratégica brillante del alto mando soviético encabezado por Stalin. Los soviéticos rodearon y destruyeron a tres ejércitos fascistas, causando la muerte de 1.5 millones de nazis.
La guerra persiguió por otros tres años hasta que el Ejército Rojo tomó Berlín el 5 de mayo, 1945. (Vea Rusia en Guerra por Alexander Werth y Memorias de Marshal Zhukov.)
En noviembre 1942, de 256 divisiones alemanes, 172 lucharon contra el Ejército Rojo. Mientras, los británicos confrontaban solamente a cuatro divisiones alemanes en el Norte de Africa. En el desembarco de Normandía, los aliados se enfrentaron solamente con unas pocas divisiones porque 100 divisiones nazis fueron trasladadas a Bielorrusia y Ucrania donde el Ejército Rojo estaba ganando.
De 1941-1944, mientras el Ejército Rojo mataba a los fascistas, los Estados Unidos/Británia esperaron hasta que los nazis debilitaron al USSR. Retrasaron la Segunda Ronda hasta 1944 cuando los nazis estaban en completo retroceso del Ejército Rojo. Sin una segunda ronda, los soviéticos podrían haber liberado a toda Europa. El objetivo real de la Segunda Ronda fue para parrar el comunismo en Europa del oeste.
Los nazis concentraron sus fuerzas principales contra la USSR, sabiendo que serían tratados mejor por los Estados Unidos que por los soviéticos. Tuvieron la razón. Con excepción de unos pocos superiores nazis, todos los oficiales nazis, los matones fascistas, fueron resguardados dentro la burocracia alemán bajo el control estadounidense y británico. Y los capitalistas alemanes Krupp, Siemens, DeutscheBank, quienes aprovecharon en la construcción de armamentos y vendiendo cámaras de gas para los campos de concentración, quedaron intactos durante y después de la guerra, y los Estados Unidos rápidamente abrieron sus mercados a ellos.
Aparte del Ejército Rojo, la otra fuerza que destruyó a los fascistas fueron los partidarios. Los partidarios comunistas italianos liberaron Milán, Turín, Padua, Bolonia y Génova antes de que los Estados Unidos y Britania llegaran. El 27 de abril 1945, capturaron a Mussolini y a 18 fascistas superiores, y los ejecutaron. Los partidarios soviéticos detrás las líneas alemanes destruyeron a un millón de tropas fascistas, más de los que fueron matados por todas las fuerzas EE.UU y británicos.
Los partidarios comunistas liberaron Grecia, Albania y Yugoslavia. En Italia del norte, 23 divisiones alemanes y cuatro divisiones italianos estaban peleando contra los partidarios; en Yugoslavia, los partidarios enfrentaban a 24 divisiones alemanes, 9 búlgaro y 3 húngaros; los partidarios griegos opusieron a 10 divisiones. Los comunistas y otros organizaron huelgas y sabotaje en Italia, Francia y hasta en Alemania.

Mentira n. ° 3: Churchill fue un gran líder de guerra
Churchill era anticomunista, racista y un ferviente guerrero de clase para los imperialistas británicos. En 1910, como Ministro del Interior, envió tropas contra mineros en huelga y trabajadores del transporte. También aconsejó la esterilización obligatoria de los “mentalmente perturbados” para “mejorar el acervo racial británico”.
Durante la Guerra Civil en Rusia (1918-21) organizó la intervención británica contra el nuevo estado obrero en un vano intento de aplastarlo. Abogó por el uso de gas venenoso en Irak contra los árabes rebeldes, y organizó los Black and Tans, quienes aterrorizaron a los católicos en Irlanda.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Churchill retrasó la apertura del Segundo Frente en el Oeste contra los nazis. Envió tropas británicas a Grecia para instalar un rey fascista, después de que éste país fuese liberado de los nazis por partidarios dirigidos por los comunistas. Churchill sirvió bien a la clase gobernante británica, pero las masas en Asia y África acabaron con el dominio colonial británico poco después de la guerra.
Mentira n. ° 4: Japón fue derrotado por EE. UU.
El Ejército Rojo chino destruyó más de 1,7 millones de tropas fascistas y sus títeres. Esto fue mucho más que la cantidad de soldados japoneses destruidos por los ejércitos británicos, de los EE. UU. y del Kuomintang (los nacionalistas chinos) combinados. Las dos principales campañas de guerra contra los EE. UU. involucraron a menos de una quinta parte de las fuerzas japonesas que luchaban contra los comunistas en China.
Mentira n. ° 5: se necesitaron bombas atómicas para poner fin a la guerra japonesa rápidamente
Stalin, Roosevelt y Churchill habían acordado que el Ejército Rojo soviético, después de derrotar a los nazis, atacaría a las fuerzas japonesas en China, supuestamente para evitar las altas bajas que resultarían de una invasión de Japón. Pero EE. UU. ya había probado la bomba atómica y la había arrojado el 6 de agosto, dos días antes del ataque soviético previsto. EE. UU. pudo reclamar el reconocimiento de la rendición japonesa y obtener el control total de Japón después de la guerra.
Las bombas atómicas se utilizaron para advertir a la Unión Soviética y a los trabajadores del mundo que luchaban por la revolución de que un poder capitalista poseía una súper arma y la usaría para mantener el dominio. Hasta los eruditos capitalistas ahora admiten que EE. UU. mintió sobre la Bomba salvando entre 500.000 y 700.000 vidas estadounidenses que según Truman se habrían perdido en una invasión a gran escala (el gobierno japonés había enviado propuestas de rendición durante meses).
Mentira No. 6: Hitler fue la causa de la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto
La causa fundamental de la guerra es la necesidad continua de la clase dominante de amasar capital y explotar a los trabajadores y los recursos naturales. Las clases capitalistas europeas lucharon guerras coloniales por el control del trabajo y los recursos. Los EE. UU. invadio Panamá para asegurar el Canal y lanzaron la Guerra del Golfo para controlar el petróleo del Medio Oriente.
El holocausto suele atribuirse a la “mentalidad nazi”. La mentalidad nazi es realmente capitalista en su forma más oprobiosa. El capitalismo se nutre del racismo. Aunque el asesinato de decenas de millones en unos pocos años no tiene precedentes en la historia humana, hay muchos otros ejemplos de asesinatos masivos racistas, incluido el tráfico de esclavos desde África y la matanza de pueblos originarios en las Américas.
Mentira n. ° 7: el partido nazi, no la clase capitalista, hizo fascista a Alemania
La clase capitalista alemana forzó el fascismo en Alemania. Esta clase de banqueros y hombres de negocios financiaron a Hitler. Le dio dinero para organizar a los soldados de asalto que aterrorizaban a la clase trabajadora. Hitler prohibió las huelgas y colocó a los comunistas y activistas sindicales en campos de concentración. Entre 1934 y 1938, mientras los salarios reales cayeron, las ganancias de los capitalistas aumentaron en un 50 por ciento. Los capitalistas alemanes obtuvieron grandes ganancias de la guerra del trabajo esclavo.
Mentira n. ° 8: Las Fuerzas Soviéticas eran antisemitas
Una gran mentira es que las fuerzas soviéticas eran antisemitas. De hecho, una de las primeras órdenes que Stalin le dio al Ejército Rojo fue evacuar a los judíos del este hacia la seguridad de la retaguardia soviética, fuera del alcance del avance del ejército nazi. Cientos de miles de judíos lucharon en el Ejército Rojo y como partidarios en la Unión Soviética y Europa. A fines de 1941, se enviaron agentes especiales desde Moscú para luchar contra cualquier antisemitismo. Por el contrario, en la República Federal de Alemania anticomunista (FRG), donde la sentencia promedio de cárcel por crímenes de guerra fue de diez minutos por cada víctima asesinada, la mayoría de los asesinos nazis retuvieron sus trabajos.
Mentira n. ° 9: la democracia liberal es lo opuesto al fascismo
Cada estado capitalista, liberal o fascista, es una dictadura sobre la clase trabajadora para crear y mantener las condiciones para la explotación de los trabajadores. Cualquier trabajador en huelga fácilmente obtiene experiencia de primera mano de esta realidad. Cuando la economía está creciendo y la oposición de los trabajadores no es militante, el estado capitalista puede permitir algo de libertad de expresión. Pero cuando suceden las crisis, el Estado capitalista revela su verdadera naturaleza. El fascismo es la forma lógica del poder estatal capitalista.
A medida que la Gran Depresión de la década de 1930 se apoderó del mundo, el fascismo se extendió por todo el mundo. La Unión Soviética, luego dirigida por los comunistas y una fuente de inspiración para los trabajadores del mundo, era su principal objetivo. El comunismo, no la democracia liberal, es lo opuesto del fascismo.
Mentira n. ° 10: los judíos permitieron que los nazis los masacraran
El asesinato de millones de judíos, gitanos y otros que fueron considerados “untermenschen” (en alemán, “subhumanos”) por los nazis es uno de los actos más bárbaros en la historia moderna. A pesar de que aceptan la existencia del holocausto, los medios de los patrones han difundido una serie de mentiras.
Películas como “La lista de Schindler” implican que los judíos fueron como corderos al matadero. En realidad, hubo una resistencia generalizada a los nazis en los guetos y los campamentos. A principios de 1943, 50.000 judíos en el Gueto de Varsovia, organizados por el Partido Comunista y otros grupos antinazis, lucharon durante semanas contra una división de las SS.
Los incendios de la revuelta ardieron incluso dentro de las fábricas de muerte nazis. Los presos de Auschwitz volaron un crematorio con la ayuda de la dinamita de contrabando. En Sobibor, una audaz revuelta organizada con el liderazgo de un oficial del Ejército Rojo mató a 50 guardias de las SS con 300 prisioneros escapando a la libertad. Los comunistas en los guetos lucharon contra los “líderes” vendidos que sirvieron a los nazis llevando a cabo sus órdenes y diciéndole a la gente que no se defendieran.
¿Por qué la cultura capitalista miente sobre estos eventos? Una de sus funciones importantes es difundir la pasividad frente a la opresión. Además, es un hecho que la mayor parte de la lucha judía contra los nazis fue liderada por los comunistas, y era fundamentalmente antirracista. Entonces, los capitalistas racistas y anticomunistas esconden la verdad de la resistencia judía.
Si bien la victoria sobre el fascismo es parte del legado de la clase obrera mundial, no debemos pasar por alto los errores de su liderazgo comunista. En la Unión Soviética, se hicieron concesiones al nacionalismo. Los rangos militares se introdujeron en 1937, en contra del espíritu proletario. Los comunistas desarrollaron coaliciones con capitalistas “antifascistas” (por ejemplo, Gran Bretaña y EE. UU.) bajo la apariencia de luchar contra el fascismo. Estos errores ayudaron a mantener el capitalismo en Europa occidental y restablecieron el capitalismo por completo después de la muerte de Stalin.
Hoy, con las crisis cada vez más profundas y la rivalidad imperialista, las nubes fascistas se están reuniendo rápidamente. Es esencial para el PLP liderar a la clase obrera en otra lucha contra el capitalismo y sus monstruos del fascismo y la guerra. La lucha es más difícil porque ahora no hay un centro de poder de la clase trabajadora como lo era entonces la URSS. Pero si aprendemos de la historia, no iremos a mitad de camino; lucharemos por el comunismo y la verdadera emancipación de la clase trabajadora.

Information
Imprimir

Aniversario n. 170 Lecciones del Manifiesto Comunista

Information
22 Febrero 2018 336 visitas

A fines de 1847, una sociedad secreta de propaganda europea, la Liga Comunista, solicitó a Karl Marx y Frederick Engels que escribieran una declaración de propósito de la organización. En febrero de 1848, apareció el documento. Fue llamado el Manifiesto Comunista.
“Este trabajo describe la nueva concepción del mundo, el materialismo consistente, que también abarca el campo de la vida social, la dialéctica, como la doctrina más completa y profunda del desarrollo, la teoría de la lucha de clases y del papel revolucionario histórico mundial del proletariado -el creador de una nueva sociedad comunista “.
- V.I. Lenin, Karl Marx (1913)

Con el tiempo, el Manifiesto se convirtió en el documento más venerado entre los revolucionarios en todas partes. Después de 170 años, nosotros en el Partido Laboral Progresista todavía tomamos estas palabras en serio:
“Los comunistas desdeñan ocultar sus puntos de vista y objetivos. Ellos declaran abiertamente que sus fines solo pueden alcanzarse mediante el derrocamiento forzoso de todas las condiciones sociales existentes. Que las clases dominantes tiemblen ante una revolución comunista. Los proletarios no tienen nada que perder excepto sus cadenas.”
Las clases dominantes entendieron la importancia de las ideas marxistas. Todavía estamos comprendiendo su importancia histórica.

En 1895, Lenin escribió:
“Los servicios prestados por Marx y Engels a la clase trabajadora pueden expresarse en pocas palabras: enseñaron a la clase trabajadora a conocerse a sí misma y ser consciente de sí misma, y sustituyeron la ciencia por los sueños”.
- V. L Lenin, Frederick Engels (1895)

Todos aquellos que deseen desarrollarse como revolucionarios deberían entender el Manifiesto Comunista y observar las similitudes y diferencias entre los primeros comunistas y el PLP. Sus puntos principales son estos:

(l) Los comunistas deben “publicar abiertamente sus puntos de vista (y) sus objetivos” al mundo. Marx y Engels creían, al igual que nosotros, que ser audaz y explícito sobre las ideas comunistas es la única forma de construir un movimiento para el comunismo.
 (2) “La historia de todas las sociedades hasta ahora existentes es la historia de las luchas de clases”. Ha sido la lucha entre los opresores y los oprimidos la que finalmente conduce a la destrucción de los opresores y al progreso de la historia.
 (3) Sin embargo, el capitalismo tiene una singularidad que no se ha encontrado antes: “Nuestra época, la época de la burguesía, posee, sin embargo, esta característica distintiva: ha simplificado los antagonismos de clase. La sociedad en su conjunto se divide cada vez más en dos grandes campos hostiles, en dos grandes clases enfrentadas directamente: la burguesía y el proletariado “.
 (4) El capitalismo tiene otra característica distintiva: “Despiadadamente ha desgarrado los abigarrados lazos feudales que unían al hombre con sus ‘superiores naturales’, y no ha dejado ningún otro nexo entre el hombre y el hombre que el egoísmo ... para la explotación, velado por ilusiones religiosas y políticas, ha sustituido a la explotación desnuda, desvergonzada, directa y brutal “.
 (5) Pero con esta forma más explícita de explotación se plantaron las “semillas de la destrucción” de la burguesía: la clase trabajadora: “En la medida en que se desarrolla la burguesía, es decir, el capital, en la misma proporción está el proletariado, la clase trabajadora moderna, desarrollada: una clase de trabajadores, que viven solo mientras encuentran trabajo, y que trabajan solo mientras su trabajo aumente el capital “.
 (6) Finalmente, el objetivo de los comunistas -el tema que separa a los revolucionarios de los pretendientes- es “el derrocamiento de la supremacía burguesa, la conquista del poder político por parte del proletariado”, la dictadura de la clase trabajadora.
Como era solo el arma inicial para un movimiento en su infancia, el Manifiesto tenía algunas omisiones importantes. Marx y Engels conocían más o menos el tipo de mundo que querían---un mundo dirigido por trabajadores---pero no tenían la menor idea de cómo lograrlo. Este conocimiento llegaría más tarde, ayudado por los valientes trabajadores de París en 1871 que usaron la violencia masiva para establecer la Comuna de París.
Marx y Engels fueron muy vagos sobre el papel de la ideología o la influencia de las ideas burguesas en la clase trabajadora. Desde entonces, hemos aprendido que el papel de los comunistas es demoler las ideas de los patrones entre los trabajadores y los estudiantes y desarrollar ideas comunistas para crear el ejército revolucionario que destruirá el capitalismo. Para hacer eso, necesitamos un partido unido en todo el mundo. Únase al PLP y convierta las palabras del Manifiesto Comunista en realidad.

Information
Imprimir

Combatir la reforma racista de inmigración Los Obreros no tienen fronteras

Information
09 Febrero 2018 243 visitas

En su discurso racista y divisivo del Estado de la Unión¸ el presidente Donald Trump hizo lo mejor que pudo para culpar a los inmigrantes por la intensificación del capitalismo EE.UU. en medio de la agudización de la rivalidad inter-imperialista. Para convencer a la clase trabajadora de los EE.UU. de ir a guerra sobre el petróleo del Medio Oriente y otros intereses de la clase gobernante, los patrones necesitan aumentar el racismo contra los trabajadores en otros países. Así como Hitler culpo a los judíos de la depresión en Alemania en los 1930’s, Trump está tratando de culpar el crimen violento y la perdida de trabajos a los inmigrantes huyendo de los regímenes de terror apoyado por los EE.UU. y la inestabilidad económica del capitalismo.
Pero los trabajadores no pueden ser engañados. La clase trabajadora internacional no tiene fronteras. Los “inmigrantes” simplemente son trabajadores súper explotados quienes están forzados a moverse más allá de las arbitrariamente líneas fronterizas patronales por los fracasos del sistema de ganancias. De frente a estos ataques de Trump y los patrones que él sirve, tenemos que construir un partido comunista revolucionario para derrumbar todas las paredes y muros fronterizos que sirven a los capitalistas. Tenemos que crear un mundo nuevo que honra la labor de los trabajadores y atiende a las necesidades de los trabajadores.
Dos marcas del fascismo
El capitalismo EE.UU. esta en declive en comparación a China y Rusia. En un esfuerzo desesperado para detener su posición superior, los patrones EE.UU. se han sumergido en guerras de Siria a Afganistán a Yemen, todo esto en preparación por el más amplio conflicto global por llegar. Pero los gobernantes EE.UU. también se están enfrentando con significantes divisiones en sus propios campamentos. La sección de la clase gobernante orientado domésticamente esta menos invertido en una guerra prospectiva por el petróleo del Medio Oriente. Está promoviendo una más pequeña, menos costoso, un predominantemente militar blanco entrenados como asesinos racistas.
Pero el ala dominante del capital financiero entiende que se necesita un ejército “multicultural” para la Tercera Guerra Mundial por venir. Estos patrones ven a los inmigrantes como inestimable carne de canon, y están dispuestos a ofrecer la ciudadanía EE.UU. como incentivo para reclutar a inmigrantes a su máquina de matanza. Como noto el presidente anterior Barack Obama, los inmigrantes jóvenes conocidos como Sonadores “comienzan nuevos negocios, trabajan en nuestros laboratorios, sirven en nuestro militar, y contribuyen de otro tipo al país que amamos” (cnn.com, 9/5/17).
El resultado de este debate significa más fascismo, ya sea de una cara abiertamente racista o una apariencia liberal. El discurso de Trump-ofreciendo un “camino “a la ciudadanía para 1.8 millones de “Sonadores” mientras excluyendo a miembros de la familia, acelerando las deportaciones, construyendo una pared, y demonizando a otros inmigrantes como criminales – quizás hubiera sido un torpe intento a un consenso entre los campamentos patronales en conflicto. La incoherencia de sus planes de inmigración, que parece cambiar día a día, es un síntoma de la volatilidad y una vista a corto plazo del racista Trump. Pero también refleja una contradicción esencial para la clase capitalista. Por un lado, todos los patrones necesitan usar el racismo anti-inmigrante para dividir a los trabajadores, bajar los salarios y evitar la amenaza mortal de una clase trabajadora unida. Por el otro lado, todos los patrones necesitan a los inmigrantes como una fuente de mano de obra barata. Como escolar de inmigración Mae Ngai noto en el New York Times (1/29):
    La migración es propulsada por los incontenibles deseos humanos para la reunificación familiar, el mejoramiento económico y seguridad física…El realidad, la migración indocumentada no es una desviación de la inmigración “normal.” Esto es el inevitable resultado de cualquier póliza general de la restricción de inmigración. La restricción crea dos corrientes de inmigración, legal e ilegal. Esto es una presunción del poder soberano en pensar que solamente puede tener inmigración legal.
Reforma migratoria: Solamente otro ataque contra los trabajadores
Bajo Trump, el ataque contra los trabajadores inmigrantes ha cambiado e intensificado. Los agentes de Inmigración y Aduanas (ICE) se están poniendo más agresivos – deteniendo y deportando cualquier inmigrante indocumentado que encuentren, no solamente los que están convictos de haber cometido crímenes, como bajo Obama. Trump ha parado el programa de DACA (Acta del Sueno –Ley Dream), siendo sujeto a deportación a 800,000 personas indocumentadas que entraron a los Estados Unidos de niños. Él ha hecho lo mismo a cientos de miles de inmigrantes de países que sostuvieron desastres naturales (incluyendo a Haiti y El Salvador) en terminando sus Estatus de Protección Temporal (TPS). Trump también quiere terminar el programa de lotería de visas, que concede cartas verdes a 50,000 inmigrantes cada ano de países con bajos números de inmigración, y parar a inmigrantes de legalmente trayendo a familiares aparte de esposos/as y niños dependientes. El plan de Trump para la inmigración basada en los méritos de países como Noruega es un paso transparente para intensificar el racismo anti-inmigrante por trazar una línea entre “buenos” inmigrantes , o sea, gente blanca que habla el inglés con títulos universitarios, y todos los demás. El propone dividir a la clase trabajadora mientras animando a la base supremacía blanca quien lo eligió en 2016.
No se puede confiar en los Demócratas
La historia demuestra que la clase trabajadora no puede confiar en el partido demócrata para defender y proteger a los trabajadores inmigrantes. En los 1990’s, bajo demócrata Bill Clinton, la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos inicio operaciones llamados “Gatekeeper” y “Hold the Line”, en que concentro agentes y la tecnología para hacer un “despliegue de fuerza” para los potenciales que piensan cruzar la frontera ilegalmente (cbp.gov) y supervisó el “primer paso mayor federal hacia la construcción de un muro fronterizo” en Tejas, Arizona, y California (cndls.georgeown.edu). La administración de Clinton deportó un record de 12.3 millones de inmigrantes y presionó para leyes que estableció “nuevos procedimientos de deportación, multas por los crímenes de entrada ilegal y reingreso, mandatos para la detención de no ciudadanos que pueden ser deportados, y una estructura para arreglos cooperativos sobre la aplicación de inmigración entre el gobierno federal y agencias estatales y policía local” (Migration Policy Institute, 1/26/17).
Más recientemente, Obama deporto a más de 2 millones de personas y criminalizo a más inmigrantes que cualquier otro presidente. Mientras las apelaciones groseras de Trump a la supremacía blanca son más abiertamente viles, y ha presionado para prohibir a los inmigrantes de países principalmente musulmanes, su posición racista acerca la inmigración esencialmente no es diferente de su predecesores, demócratas o republicanos (New York Times, 1/29). De hecho, Trump deporto a menos personas el 2017 que Obama en 2016 (politifact).
Luchar contra el racismo anti-inmigrante
Como comunistas, damos la bienvenida a los inmigrantes como compañeros de trabajo quienes han sido los más militantes luchadores contra la brutalidad y explotación capitalista. Miles de grupos ahora están luchando contra las deportaciones de Trump. Los maestros en sindicales han formado comités contra las deportaciones. Abogados de Nueva York han demostrado para expulsar a agentes ICE del sistema judicial. Los movimientos de “Santuario” están protegiendo a los inmigrantes y publicando sus historias. En Norwalk, Connecticut, Nury Chavarría, una madre afrontada con deportación a Guatemala después de 24 años en los Estados Unidos, ganó más tiempo después de que varios cientos de trabajadores demostraron en su nombre. Un estudiante indocumentado de Boston, encarcelado en una cárcel de ICE, fue concedido fianza después de que un movimiento “go-fund-me” de estudiantes de su escuela recaudaron el dinero para la fianza. Todos los días, voluntarios dejan comida y agua en el Desierto Sonora para salvar a los migrantes de muerte por deshidratación y golpe de calor.
Respuesta comunista
El Partido Laboral Progresista llama a todos los trabajadores a que defiendan a nuestros hermanos y hermanas inmigrantes contra la deportación, y para luchar contra las mentiras racistas de Trump. ¡Derrotemos las deportaciones racistas! Entrenémonos y a nuestra clase para luchar por un mundo donde jamás haiga “deportados.”

Information
Imprimir

ACABEN CON BANNON No libertad de expresión para fascistas

Information
09 Febrero 2018 284 visitas

CHICAGO, 2 de Febrero—Mas de 70 estudiantes antirracistas y gente de la comunidad de la Universidad de Chicago Booth School of Business, se plantaron en contra de la invitación que se le hiciera al supremacista blanco Steve Bannon, anterior estratega de Donald Trump.
Camaradas del Partido Laboral Progresista estuvieron ahí para señalar el papel de Bannon dentro del contexto del creciente fascismo y ofrecer como solución la lucha revolucionaria comunista para aplastar el sistema capitalista que crea tipejos racistas como Bannon y su anterior jefe.
Ataquemos a todos los fascistas directamente
En las escaleras de la escuela de negocios, los líderes de varias organizaciones enfatizaron la necesidad de que la lucha contra el racismo y sexismo vaya mas allá que la lucha inmediata en contra de Bannon. Oradores hablaron del historial racista de la Universidad de Chicago sobre el desplazamiento de residentes a través de la gentrificación. (ver recuadro)
Militantes del PLP, con consignas de “Metámosle Miedo a los Racistas Nuevamente” y “No Libertad de Expresión a Racistas” se unieron con otras como: “Dilo fuerte, dilo claro, fascistas/nazis no son bienvenidos”. Como una docena de participantes acepto el DESAFÍO y la mayoría estaban felices de vernos en la marcha y el plantón.
Una docena de fascistas, protegidos por la policía racista, estaban al cruzar la calle. Uno de los camaradas se les acerco y ataco su racismo directamente. Nuestro Partido se enfrenta directamente a los racistas porque ignorarlos no nos ayudara en la lucha contra el creciente fascismo de los patrones capitalistas. Es mas, la respuesta liberal de ignorar a el discurso racista de los fascistas, aduciendo a una ridícula “superioridad moral” solo nos ha llevado a que mas oradores racistas se presenten en las universidades a nivel nacional. También los crímenes violentos contra trabajadores negros, árabes, latinos, y asiáticos ha aumentado drásticamente.
La ”libertad de expresión” capitalista, solo beneficia a patrones
El presidente de la Universidad de Chicago, Robert Zimmer, dice que la institución promueve la libertad de expresión para todos. Sin embargo cuando un grupo trato de entregarle una petición oponiéndose a la invitación de Bannon, Zimmer no perecía muy interesado en hablar con los peticionarios. Pero Zimmer estuvo feliz de atender al profesor Luigi Zingales, el colaborador fascista que invito a Bannon. Los capitalistas racistas apoyan la libertad de expresión cuando divide a la clase trabajadora y fortalece la agenda política de los gobernantes de dividir y explotar a toda la clase trabajadora. Los comunistas, por otro lado, valoramos solamente el discurso que tiene merito objetivo y científico, y lo usamos para apoyar los intereses de la clase trabajadora internacional.
Agudizando la Lucha Futura
Después de una corta marcha en donde nos tomamos una intersección, el grupo se reunió en una iglesia local para planear la próxima acción. Los camaradas del PLP propusieron rodear y enfrentar a los racistas en cualquier acción futura. También propusimos que las manifestaciones fueran en los barrios de trabajadores negros pobres en los alrededores de esta universidad de elite, no en el centro de la ciudad. Un camarada señalo la importancia de enfocar las protestas en la clase trabajadora negra y latina, ya que son los primeros blancos de los ataques racistas y sexistas que voceros fascistas como Bannon provocan. Aunque sabemos que las manifestaciones también deben atraer a trabajadores del centro de Chicago, el hecho que algunos organizadores liberales creyeron que era mas importante llevar la lucha a esta parte adinerada de la ciudad nos dice mucho.
Yendo mas allá, un camarada veterano recalco la importancia mundial de parar a Bannon aquí. Cito una acción del PLP en 1985, cuando unos camaradas en la Universidad Northwestern le lanzaron pintura roja a Adolfo Calero, el líder de los Contras nicaragüense. También señalo la relación opuesta entre la fortaleza del movimiento antifascista y la eventual fortaleza del estado fascista. Mientras nos preparamos para la revolución, salvamos a millones de trabajadores. ¡Todo lo que hacemos cuenta!
También dijimos que el problema va mas alla de Bannon o Trump, y que la opresión racista empeora bajo liberales como Barack Obama. Debemos luchar contra todo el sistema capitalista.
El Partido seguirá trabajando con estos estudiantes y con los trabajadores de la ciudad en la lucha contra fascistas como Bannon y la clase capitalista que los protege. ¡Mantengámonos alerta!

 

*****

La Historia imperialista y racista de la Universidad de Chicago

En 1857, la dote para la fundación de la universidad fue donada por Stephen A. Douglas, notoriamente cruel esclavizador. Las diez hectáreas de Douglas estaban empapadas con la sangre de esclavos negros traídos de África.
En las décadas de 1930 y 40, la universidad creo convenios racialmente restrictivos, impidiendo la venta de propiedad a compradores negros. El Chicago Defender reporto que “muchos de los dueños de propiedades se referían a los convenios restrictivos de ‘los Acuerdos de la Universidad de Chicago para deshacerse de los negros’”.
La universidad fue el hogar del archí-imperialista economista Milton Friedman, cuyas políticas letales de capitalismo neoliberal fueron instruidos a una generación de agentes de la clase dominante chilena. “Los Chicago Boys”, como se les conocía, guiaron las políticas de Friedman durante el gobierno fascista del dictador chileno Augusto Pinochet (1973-1990), cuando un sin numero de vidas obreras fueron destruidas a través de la represión política o la privatización generalizada de la economía (Nation, 21/9/16).
El calvario de la gentrificación y desplazamiento de la UC continua sin tregua hasta hoy – recientemente en Woodlawn, un barrio obrero negro al sur de la universidad, rompiendo un acuerdo que no construirían mas alla de la calle 61, la universidad ha decidido extenderse construyendo una nueva escuela privilegiada y el Centro del Presidente Obama, entre los proyectos.
En 2015, mientras que la universidad cabildeaba para la librería de Obama, anuncio que construiría un centro de trauma en su escuela de medicina – algo que no ha existido en los últimos 20 años en el sur de Chicago, que es mayormente negro. Muchos trabajadores han muerto sin necesidad debido a esta indiferencia racista para con sus vidas. (The Chicago Maroon, 15/9/17).

Information
Imprimir

La Ley de Seguridad Interior, evidencia de la dictadura capitalista

Information
09 Febrero 2018 354 visitas

La aprobación de la Ley de Seguridad Interior por parte de ambas cámaras del poder legislativo, la promulgación por Peña y el inminente aval de la Suprema Corte, es una muestra de que la clase capitalista en el poder puede modificar la ley de acuerdo a sus intereses de clase, es decir, la ley responde a sus necesidades. Pone claramente en evidencia que vivimos bajo la dictadura de una minoría millonaria, rapaz y explotadora, que usa la democracia o el fascismo para garantizar la existencia y funcionamiento de su sistema de explotación y ganancias.
A pesar de la oposición de varios sectores de la misma clase capitalista y sus instituciones, intelectuales, artistas, organismos de derechos humanos, la inoperante Organización de las Naciones Unidas (ONU), así como de sectores de la clase trabajadora que resisten a un sistema cada vez más fascista, el sector de la clase patronal que controla el gobierno, decidió aprobar la Ley, que solo legaliza el estado militar que impuso Calderón cuando ocupó la presidencia.
Sin embargo, los trabajadores sabemos que los capitalistas no necesitan un marco legal para defender su sistema en caso de que los trabajadores se opongan a sus abusos, ejemplos sobran, la matanza del 68 en Tlatelolco, el halconazo del 10 de junio en 1971, la guerra sucia de los 70’s y 80’s, el asesinato sistemático de maestros disidentes de la CNTE, de militantes perredistas de base, la represión genocida de las comunidades zapatistas, las masacres de Aguas Blancas y Acteal, la guerra contra el narco que ha dejado a decenas de miles de muertos y desaparecidos inocentes y cientos de miles de desplazados (todos catalogados como daños colaterales), la brutal represión de la Comuna de Oaxaca, las matanzas de Tlatlaya y Tanhuato, la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, la represión criminal en Nochixtlan. El capitalismo es un sistema genocida, asesino de trabajadores, es una dictadura que defiende su subsistencia por medio de los aparatos del estado, sus leyes y sus fuerzas represivas. La desigualdad y la miseria desproporcionadas, son otras formas de violencia contra la clase trabajadora que no debemos de minimizar. No podemos hacer que un sistema así funcione bien para los trabajadores, eso es una ilusión, necesitamos una revolución comunista que acabe con la dictadura capitalista de una minoría sobre la mayoría de la población.
Un sector de la clase capitalista, incluidos sus intelectuales y “artistas”, creen que el capitalismo puede funcionar democráticamente, confían en que el sistema puede ser más justo y han arrastrado a cientos de miles de trabajadores a esa idea, cuyo máximo líder y representante es López Obrador. Pero eso es un engaño, la dictadura capitalista tiene dos máscaras, la fascista y la democrática, se pone cualquiera de ellas, según convenga a sus intereses de clase. Todos los candidatos de los partidos electoreros, defienden el interés del capital, José Antonio Meade, Ricardo Anaya, López Obrador, Jaime Rodríguez “El Bronco” y Margarita Zavala. Ninguno de ellos plantea acabar con el sistema de ganancias y explotación, pero sí quieren hacernos creer que nosotros tenemos el poder de decidir quién nos gobernará, que tenemos esa libertad, pero sólo somos libres para elegir a nuestro próximo opresor, dentro de un sistema electoral amañado y listo para la negociación entre la clase política y los burgueses más prominentes o mejor relacionados con las burguesías transnacionales.
A diferencia de los otros candidatos, Mari Chuy, la candidata del Concejo Indígena, representa la resistencia de las comunidades a la opresión del capital, pero su postulación es un reflejo de la línea equivocada que la cúpula del Ejército Zapatista de Liberación Nacional les ha impuesto, la vía electoral, la autonomía y el nacionalismo, sin salir del marco capitalista.
La discusión de la Ley de Seguridad Interior, permitió que muchos especialistas y opositores, mostraran que viola la misma legalidad establecida en la Constitución, pero precisamente ese debate simulado de ideas, oculta que la clase patronal dicta las leyes y en consecuencia las modifica a su antojo. Una muestra es la reforma energética, cuya aprobación junto con el resto de los paquetes de reformas, fue el resultado del trabajo conjunto que hizo la clase capitalista desde el ascenso de De la Madrid al poder, los avances significativos en el plano ideológico, financiero, económico y legal con Salinas y Zedillo, el engaño democrático de la alternancia con Fox, la imposición de un estado de sitio con Calderón y la aprobación de facto con Peña. En paralelo a éste proceso de mayor control de la clase patronal sobre la riqueza energética, la clase trabajadora en México se convirtió en una de las más explotadas y miserables en el mundo, con la mano de obra más barata y las jornadas laborales más largas.
En el plano de los intereses imperialistas en México, los aspavientos de Trump al inicio de su presidencia, en el sentido de enviar tropas a México para controlar a los cárteles de la droga y controlar posibles amenazas terroristas, es una muestra de la presión de Estado Unidos para que exista un control más fascista de la población, pero en el fondo, se trata de garantizar el control del traspatio de EU, ante una mayor presencia de China, su principal rival imperial en el mundo y con cada vez mayor presencia en Latinoamérica. Sin duda, EU todavía determina las decisiones estratégicas de la clase patronal en México, ellos presionarán al gobierno mexicano para que imponga a Anaya o Meade en la presidencia, aunque Obrador gane las elecciones, si es necesario, harán uso de la Ley de Seguridad Interior para ese propósito. De hecho, su aprobación es una muestra de que han decidido qué grupo político se mantendrá en el poder, el PAN o el PRI.
La clase capitalista no es monolítica, tienen intereses particulares diferentes y a veces contrarios, pero al final sus intereses como clase son los que predominan, cuando se trata de someter a la mayoría, es decir, a la clase trabajadora. Debemos luchar contra la Ley de Seguridad Interior y contra todas las injusticias del sistema capitalista desigual, debemos prepararnos para las condiciones represivas en que la lucha de los trabajadores se desarrollará bajo esta ley, pero principalmente debemos elevar nuestro objetivo para cambiar el sistema capitalista opresor y esclavista en que vivimos, por una sociedad comunista de igualdad social.
El Partido Laboral Progresista (PLP), lucha por el comunismo, pero por el comunismo real, no el que se lleva a cabo en China, no el que nunca llegó en la URSS, donde se mantuvo el sistema de ganancias, que es lo que hace una sociedad desigual. El PLP plantea como primer punto y el más difícil, una lucha ideológica, porque estamos seguros que todas las personas podemos luchar contra el individualismo, mismo que nos han hecho creer que es propio de nuestra condición humana, luchar contra el sexismo, que acepta la matanza y desigualdad de las mujeres, contra el nacionalismo que divide, dejando atrás nuestras similitudes y enmarcando nuestras diferencias culturales, contra el racismo, que ha matado a tantos más y contra el sistema de ganancias.

  1. Obreros de transito de DC protestan contra condiciones racistas en el trabajo
  2. Estudiantes de secundaria energizan protesta el miércoles para West
  3. 75 Aniversario de la batalla de Stalingrado
  4. En memoria: De Inés Weiner

Subcategorías

Uncategorised

Página 346 de 705

  • 341
  • 342
  • 343
  • 344
  • 345
  • 346
  • 347
  • 348
  • 349
  • 350

Creative Commons License   This work is licensed under a Creative Commons License.

  • Contacto con nosotros para obtener ayuda
Back to Top
Progressive Labor Party
Close slide pane
  • Página Inicial
  • Nuestra Lucha
  • Desafio
  • Documentos Clave
  • Literatura
    • Libros
    • Folletos y Prospectos
  • Revistas
    • PL Revistas
    • Archivos Desafío
  • Únete a Nosotros
  • Buscar
  • Donar